MINSK, 2 jul (BelTA). – Se puede revolver todas las tumbas de soldados, pero no se puede cambiar el resultado de la gran guerra. Lo declaró el Presidente de Belarús, Aleksandr Lukashenko, en un acto solemne dedicado al Día de la Independencia, informa BelTA.
“Se puede revolver todas las tumbas de los soldados caídos en la lucha contra el nazismo, destruir todos los monumentos, reescribir definitivamente todos los libros de texto, se puede pisotear infinitamente las decisiones del Tribunal de Núremberg, pero el resultado de la gran guerra no se puede cambiar. Nuestra victoria es su humillación, y deben aceptarla. Una página vergonzosa en la vida de los “civilizadores” de Europa Occidental, que intentan borrar de la memoria. Y no sólo de la suya, sino también de la de sus pueblos”, subrayó el Jefe de Estado.
Señaló que a cada memorial roto se responderá con nuevos hechos de sus crímenes, nuevos nombres de asesinos de mujeres, ancianos y niños.
“No nos hacemos ilusiones de que el tribunal internacional reconozca el genocidio de los pacíficos residentes belarusos o condene a los criminales que vivieron hasta la vejez. Este organismo supuestamente independiente es demasiado parcial y dependiente. Pero los neonazis tendrán que escuchar y oír los terribles detalles de los crímenes de sus antepasados. Escuchar una y otra vez”, acentuó el líder belaruso.
