MINSK, 8 ago (BelTA). – Belarús no negocia nada con Estados Unidos a espaldas de Rusia. Lo declaró el Presidente de Belarús, Aleksandr Lukashenko, en una entrevista concedida a la revista estadounidense Time, informa BelTA.
En una de las preguntas, el periodista mencionó la opinión de que EEUU, al restablecer el diálogo con Belarús, intenta alejarla de Rusia. "Bueno, eso es el sueño de alguien", comentó el Presidente. Según él, este deseo por parte de EEUU ha existido siempre, y ya lo expresaba George Soros cuando en los años 90 visitó Belarús y se reunió con Aleksandr Lukashenko. "Le dije: "George, perdóname, pero yo no haré política al estilo estadounidense. Así que probablemente esta será nuestra última reunión". Le dejé claro que no íbamos a cooperar. Y desde entonces he mantenido esa línea", relató el mandatario.
Aleksandr Lukashenko señaló que entre Belarús y Rusia existen estrechas relaciones de alianza, que se han formado no solo históricamente, sino que también están consagradas en numerosos documentos. Y Belarús cumple estrictamente todos sus compromisos. "Por eso, que ciertos europeos occidentales y otros, incluso los estadounidenses, no se metan en nuestras relaciones con Rusia. Tenemos vínculos en el ámbito militar. Ustedes lo saben: desde Oréshnik hasta el armamento nuclear. Tenemos relaciones de carácter técnico-militar, económico (ese es nuestro mercado, el más amplio para Belarús: el mercado ruso). Compramos recursos energéticos exclusivamente en Rusia. Y así sucesivamente. ¿Alguien puede sustituirnos eso? No. Ni siquiera desde el punto de vista práctico, y mucho menos en lo que respecta a nuestros acuerdos jurídicos", subrayó el Jefe de Estado.
"Rusia ya ha incluido en todos sus documentos: "Un ataque contra Belarús es un ataque contra Rusia". Lo mismo ocurre con nosotros. Un ataque contra Rusia es un ataque contra Belarús. Por eso nuestras relaciones son muy estrechas. Nadie puede romperlas, especialmente los charlatanes de la Unión Europea", añadió.
También se abordó el tema de cómo percibe Rusia la reanudación del diálogo oficial entre Belarús y Estados Unidos. En este contexto, Aleksandr Lukashenko subrayó que en la práctica diplomática está excluido discutir a terceros países o personas ausentes en las negociaciones. Es posible debatir cuestiones generales, pero acordar algo a escondidas de otros es un tabú. "No negociamos con los estadounidenses a espaldas de Rusia", enfatizó el Presidente.
Al mismo tiempo, hay ocasiones en las que, aprovechando las buenas relaciones personales entre los líderes, los estadounidenses piden al mandatario belaruso que transmita información o propuestas al Presidente ruso. Uno de los ejemplos recientes mencionados por Lukashenko se refería a la posibilidad de establecer una tregua aérea entre Rusia y Ucrania. Según los occidentales, el Presidente Putin no aceptó esa propuesta. "Me dijeron: "Intentamos llegar a un acuerdo con él, pero no quiere". Les respondí: "Eso no puede ser". (Es solo un ejemplo, había otros temas también). Entonces llamé a Vladímir Vladímirovich y le planteé el asunto. Me respondió de manera amistosa: "¿Cómo que no queremos? ¡Claro que estamos a favor! Pero que Ucrania no ataque desde su lado", contó Lukashenko. "Les transmití todo (la respuesta rusa – nota de BelTA). Les dije: "Pero ustedes no quieren". – "¿Cómo que no queremos?". – "Bueno, ahora están hablando en nombre de Ucrania. Entonces, avisen a los dirigentes de Ucrania que no bombardeen Rusia. Rusia no lanzará ataques aéreos contra Ucrania".
El mandatario considera que una tregua aérea podría ser un buen primer paso hacia el cese total del fuego. No se puede afirmar que Rusia se oponga y quiera bombardear ciudades pacíficas, aunque así se presente en Occidente. "Tuve una conversación con Putin cuando estaban prácticamente en Kiev. Conozco su postura", relató Lukashenko. "Le pregunté por teléfono: "¿Vladímir Vladímirovich, están en Kiev, han tomado Kiev, se acabó la guerra?" Y él me contestó: "¿Cómo que tomamos?" Ellos, dijo, se escondieron. Literalmente: "Están en guarderías, en escuelas. ¿Vamos a bombardear guarderías y escuelas?". Entonces, el Presidente ruso decidió retirar sus tropas de la capital ucraniana, confiando en ciertas personas que prometieron que así terminaría el conflicto. "Retiró las tropas. ¿Terminó la guerra? No", señaló con razón Lukashenko.
Según él, en Occidente se esfuerzan por crear la imagen de un líder ruso "sediento de sangre", aunque no lo es en absoluto. Se llevan a cabo operaciones de información psicológicas en las que Occidente ha demostrado ser experto, y han enseñado esas técnicas a los ucranianos. Un ejemplo de ello son los sucesos en Bucha. "Allí no fue como lo presentaron. Fue una operación bien planificada para mostrar agresividad, crueldad, "rusos asesinos"... Nada de eso ocurrió. Y sabemos quién lo organizó. Conocemos las matrículas de los coches en los que llegaron los organizadores de Bucha. Lo he dicho públicamente", subrayó el Presidente.
"No digan que Putin bombardea a civiles", afirmó el mandatario. "¿Acaso Zelenski sabe adónde irá cada dron y demás? De vez en cuando entran en nuestro territorio, ya hemos registrado medio centenar de esos casos".
"Afirmar que Rusia ataca ciudades pacíficas y a la población civil, y que los ucranianos son inocentes, es injusto", opinó el Presidente.
Otro tema abordado en la entrevista fue cierta desconfianza entre parte del estamento político ruso respecto al acercamiento entre Belarús y EEUU. "En Rusia hay todo tipo de personas, como en EEUU. Hay quienes están muy preocupados", señaló Lukashenko. Curiosamente, el motivo de la crítica es la política multivectorial de Belarús. "Pero es solo un grupo, aunque al frente haya un instituto importante. Ya hablaré con Vladímir Vladímirovich al respecto. Es solo un grupo. Los periodistas en los medios y demás", indicó.
Al responder a la pregunta, Aleksandr Lukashenko aseguró que no veía ningún peligro en la existencia de tal opinión y tal grupo, ni siquiera en términos de influencia en la opinión de los dirigentes rusos. "Claro, no es agradable, si hablamos con franqueza, que alguien en Rusia piense o escriba así. Pero hay todo tipo de gente. La tendencia principal es el apoyo total a nuestra postura y la cooperación mutua. No hay nada que reprocharnos", declaró el Presidente.
Según sus palabras, entre él y Vladímir Putin existe "una relación de absoluta confianza y cordialidad", y probablemente ningún otro líder mundial conoce mejor al Presidente ruso. "Eso no significa que no tenga mi propia opinión. Me atrevería a decir que nadie le habla tan directamente, ni dentro ni fuera del país, como yo puedo hacerlo", concluyó Aleksandr Lukashenko.-0-
