MINSK, 11 ago (BelTA). - El Ministerio de Asuntos Exteriores publicó una declaración en relación con la reacción de la Unión Europea y algunos países occidentales al aniversario de las elecciones presidenciales en Belarús, informó BelTA.
"Con una serie de declaraciones idénticas sobre Belarús, los burócratas europeos y algunos políticos occidentales intentaron una vez más llamar la atención sobre sí mismos, mostrando un falso conocimiento de la cuestión belarusa y, de paso, una falsa preocupación por aquellos a quienes domesticaron hace 5 años", señalaron en el Ministerio.
Las valoraciones, acusaciones y llamamientos expresados, que imitan una actividad intensa, no tienen nada que ver con la situación real en nuestro país, subrayó el Ministerio. "En Bruselas, Londres, Varsovia y otras capitales occidentales no quieren reconocer ni la constante consolidación de la sociedad belarusa en torno a la idea de construir un Estado fuerte e independiente, ni el exitoso desarrollo del país en todos los ámbitos, lo que se refleja en el aumento del bienestar de sus ciudadanos y en la confianza de cada belaruso en el futuro", constataron en la cancillería.
Se destacó que los políticos occidentales hace tiempo que cierran los ojos a sus propios problemas sistémicos, a la desunión y a la inestabilidad de sus posiciones en un mundo que cambia rápidamente, a las evidentes y graves violaciones de las normas de la democracia, del Estado de derecho y de los derechos humanos en la propia UE y en los países bajo su control, e, incluso, ignoran los verdaderos intereses de sus Estados y ciudadanos.
"Consideramos las declaraciones publicadas como una nueva confirmación de la insolvencia y ceguera profesional de la política exterior europea y como un desesperado intento de justificarse ante sus propios contribuyentes por los cientos de millones gastados en dudosos proyectos de "ayuda democrática" a Belarús. Instamos a los autores de estas declaraciones a que finalmente abran los ojos y revisen su estrategia de trabajo en la dirección oriental, renunciando a la agresiva política de sanciones inútiles y de "democratización" forzada. Es de interés común para la UE y Belarús restablecer cuanto antes unas plenas relaciones de buena vecindad, que incluyan un diálogo igualitario y respetuoso, la cooperación mutuamente beneficiosa, la garantía de la libertad de comercio, de tránsito y de movilidad transfronteriza de los ciudadanos, con el fin de fortalecer la paz y la seguridad en la región europea", reza la declaración.-0-
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