MINSK, 19 dic (BelTA). - El Consejo de Seguridad en la reunión de hoy en el Palacio de la Independencia aprobó el nuevo plan de defensa de Belarús y la concepción de desarrollo de las Fuerzas Armadas hasta 2030. El bloque de documentos lo firmó el Presidente de Belarús, Aleksandr Lukashenko, anuncia BelTA.
El plan de defensa de Belarús incluye varios documentos. A lo largo del año los analizaban en el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas y examinaban en las reuniones de los organismos de seguridad. Lo esencial en el bloque es la decisión del comandante supremo respecto a la defensa de Belarús (gráfica y textual) y la directiva respecto a la defensa del país.
Como acentuó Aleksandr Lukashenko en la sesión del Consejo de Seguridad, Belarús sigue la política de paz, conserva el estatus del donante de la seguridad en la región. Con todo eso como las prioridades evidentes el Jefe de Estado nombró el desarrollo en el país del propio sistema de seguridad, la continuación de la colaboración militar con los países amistosos. “El ejército belaruso nunca amenazaba a nadie, no amenaza y no planea hacerlo. Representa un instrumento de no admisión de la guerra, en caso de agresión debe ser capaz de no solo reflejarla, sino causar sufrimientos inaceptables del enemigo. El destino principal de las Fuerzas Armadas consiste en la defensa de la soberanía, independencia e integridad territorial del país”, señaló el Presidente.
Sobre las particularidades de los documentos aprobados y sobre el desarrollo del ejército belaruso, tras la sesión relataron el Secretario de Estado del Consejo de Seguridad, Stanislav Zas, el ministro de Defensa, Andréi Ravkov, y el jefe interino del Estado Mayor General, primer viceministro de Defensa, Aleksandr Volfóvich.
Zas: Se hace hincapié en la disuasión estratégica del enemigo
“En lo que se refiere a la defensa, el hincapié se hace en la prevención del desarrollo de la agresión, en la disuasión estratégica. Se presta más atención que en el plan anterior, están elaborados los documentos respecto a la disuasión estratégica. Se dedica más atención a los asuntos de la desestabilización de la situación en el país, también son cuestiones de defensa. Es la realidad de nuestra contemporaneidad, con la cual choca todo el mundo: todo empieza con la desestabilización de la situación en el país, la provocación del conflicto armado interior”, señaló Stanislav Zas.
En la sesión la atención se prestó a la garantía de necesidades de la defensa del Estado. “Todo está calculado. Somos capaces de garantizar la seguridad militar de nuestro país partiendo de las posibilidades que tenemos. Aumentaremos poco a poco los gastos para la defensa. Eso se necesita si se plantea el objetivo de incrementar cualitativamente el potencial de las Fuerzas Armadas”, señaló el Secretario de Estado. Se planifica que en diez años los gastos para la defensa crezcan hasta el 1,5 % del PIB.
El Consejo de Seguridad también analizó el concepto de desarrollo de las Fuerzas Armadas hasta 2030. El documento determina el cuerpo y la estructura del ejército, sus tareas en el tiempo pacífico y de guerra. Conforme a las palabras de Stanislav Zas, en el concepto se acentúa la conservación del cuerpo y estructura correspondientes de las Fuerzas Armadas, su desarrollo cualitativo a cuenta de mejorar la formación en combate, rearmar y modernizar el componente técnico.
Ravkov: En primer lugar el dinero se asignará a vehículos no tripulados
Hablando sobre las particularidades del nuevo plan de la defensa, Andréi Ravkov acentuó que el documento dicho “es muy materialista”, se basa en los cálculos precisos. Se determinan las actividades que se realizarán en el tiempo pacífico, en el período del incremento de la amenaza y en el tiempo de guerra, se calcula la financiación de su organización.
El plan de la defensa incluye un plan de la disuasión estratégica. “Reflejamos todas las acciones de las estructuras militares, organismos de seguridad, ministerios y departamentos que están obligados a celebrar ya en el tiempo pacífico distintas actividades con el fin de bajar la eventualidad de aparición de conflictos o llevarla a cero”, explicó el ministro.
Además, se precisa el sistema de la gerencia del Estado en el tiempo de guerra. “Lo verificamos durante unos ejercicios. Estamos seguros de que permitirá dirigir de modo exacto y eficaz todas las fuerzas y medios durante la defensa del Estado”, agregó.
En lo que toca a la financiación de las Fuerzas Armadas, el dinero en primer lugar se asignará al desarrollo de la aviación no tripulada, reconocimiento de radar y de obtención de información transmitida por señales. Se modernizará y se comprará la aviación de combate, continuará la modernización de la artillería de misiles y de sistemas de artillería de cañón. “Entre las medidas primordiales se destaca una cuestión problemática que toca a la compra de pertrechos”, relató Andréi Ravkov.
Además, en las tropas poco a poco huirán de los medios y técnica envejecidos.
Volfóvich: Partimos de peores variantes de desarrollo de la situación
Aleksandr Volfóvich explicó que durante la preparación de documentos aprobados hoy los militares partían de peores variantes de desarrollo de la situación. Se estudió la experiencia de los conflictos en Siria, Ucrania, Bolivia, Venezuela. “Basándose en lo indicado, se hacían deducciones respecto a las etapas de la posible escalación del conflicto. El plan de la defensa incluye las medidas adecuadas de reacción”, aseveró él.
Los militares no analizan ahora (aunque no excluyen) una guerra a gran escala como tal amenaza. “Ahora en mayor grado los conflictos son muy diferentes: la situación en el país está sacudida, hay pequeños grupos, la oposición y grupos subversivos y de inteligencia. Ahora se está utilizando ampliamente a los mercenarios de las empresas militares privadas, que tratan de desestabilizar la situación en el país, para probar todo el componente de seguridad. Para eso tenemos elaborado nuestro propio conjunto de medidas”, explicó Aleksandr Volfóvich.
Por ejemplo, el ejército tiene fuerzas de respuesta inmediata, listas en caso de emergencia para cubrir las áreas a lo largo de la frontera estatal, junto con el Ministerio del Interior para tomar bajo protección los objetos dentro del país.
Sin embargo, Belarús no considera a otros estados como posibles agresores. “Somos un país pacífico, tenemos una doctrina militar defensiva, que prevé la protección de nuestra tierra”, enfatizó el jefe interino del Estado Mayor General.-0-
