MINSK, 14 dic (BelTA). – En la práctica las sanciones de respuesta desemborrachan. Tal opinión la expresó al éter del canal televisivo Belarús 1 el politólogo letón, Normunds Grostins, anuncia BelTA.
“En la práctica, que las sanciones de respuesta desemborrachan. Creo que esta política es justa: cuando te defiendes – de tratan con más respeto”, dijo Normunds Grostins.
El politólogo considera infundadas las acusaciones de la organización de la crisis migratoria. “Esta es argumento realmente ridículo. Además, se complementa con diferentes historias de que esto se está realizando con el objetivo de desestabilizar la Unión Europea, aunque hay que decir que la Unión Europea se está desestabilizando bastante bien por sí misma”.
Normunds Grostins enfatizó que las sanciones son siempre una prohibición de cierta cooperación. “Antes de la imposición de sanciones antirrusas y antibelarusas, teníamos más empresas que cooperaban. Los espadines bálticos bien conocidos estaban en demanda. En cuanto a las contrasanciones alimentarias, esto lo sintió principalmente Polonia. Por cierto, después de las contrasanciones rusas, algunas empresas se vieron obligadas a dejar de trabajar en Letonia. Es decir, se están cerrando las empresas, se están perdiendo los puestos de trabajo”, resaltó.
El experto expresó la esperanza de que prevalezca el sentido común. “En este plan, las contrasanciones también tienen un efecto positivo. Los primeros pasos con los alimentos es una respuesta muy moderada. Pero aquí hay un momento de que Polonia está cumpliendo en gran medida no sólo su propia voluntad, sino también la voluntad de sus aliados: EEUU, Reino Unido, por lo que aquí los intereses de la población y las empresas locales a menudo se sacrifican por los intereses geopolíticos”, apostilló.-0-
