GÓMEL, 10 ene (BelTA). – El secretario de Estado del Consejo de Seguridad, Aleksandr Volfóvich, comentó la situación en la frontera ucraniano-belarusa durante su visita al Destacamento Fronterizo de Mózyr, informa BelTA.
Aleksandr Volfóvich se familiarizó con el equipamiento del Destacamento Fronterizo de Mózyr y el nivel de entrenamiento del personal del grupo de maniobras, así como con la situación en la frontera del sur. También expuso las principales tendencias de la situación político-militar y las amenazas que se forman en torno a Belarús.
El secretario de Estado del Consejo de Seguridad subrayó que la situación geopolítica es complicada en toda la región de seguridad colectiva de Europa del Este. “Probablemente se caracteriza como la crisis militar y política más aguda desde la Segunda Guerra Mundial. Ucrania es un vivo ejemplo de ello – el país se convirtió en moneda corriente del Occidente colectivo. Lo que está ocurriendo hoy en el territorio de Ucrania es alarmante, peligroso y nos obliga a tomar ciertas medidas”, afirmó.
Según Aleksandr Volfóvich, antes la protección de las fronteras tenía un carácter más declarativo. “Los guardias fronterizos ucranianos y belarusos cumplían las tareas en estrecha cooperación, hombro con hombro. Y los residentes de la zona fronteriza de los dos países solían visitarse, recoger setas y bayas, algo que ahora Ucrania prohíbe categóricamente. Sin embargo, incluso antes del agravamiento de la situación y el comienzo de la operación militar especial, por desgracia, la dirección política de Ucrania intentó hacer todo lo posible para enfrentar a los pueblos hermanos de Belarús y Ucrania. La dirección política de Ucrania fue una de las primeras en sumarse a las sanciones impuestas por el Occidente contra Belarús, cerró el espacio aéreo y prohibió los vuelos de nuestra aviación civil a través del territorio de Ucrania, violando las normas del derecho internacional”, dijo.
Comentando la situación en la zona fronteriza, el secretario de Estado del Consejo de Seguridad esbozó otra serie de medidas inamistosas contra Belarús. “Hay cientos de miles de minas antipersona y antitanque, instaladas en la frontera ucraniano-belarusa, casi todos los puentes y puestos de control se destruyeron. No hay ninguna explicación sensata para esto. También se registran casos cuando los guardias fronterizos ucranianos prestan servicio en estado de embriaguez, apuntan con armas al territorio de Belarús, permiten visitas a nuestro territorio fronterizo, violan el espacio aéreo pilotando cuadricópteros. Por supuesto, recientemente registramos menos casos, porque nuestros guardias fronterizos abaten estos vehículos aéreos. Sabemos y fijamos que en el territorio de Ucrania se preparan grupos de sabotaje y reconocimiento, grupos armados ilegales, cuyo objetivo es desestabilizar la situación aquí. Por supuesto, todo esto nos obliga a tomar las medidas adecuadas”, resumió Aleksandr Volfóvich.-0-
