REGIÓN DE GORKI, 6 jun (BelTA). – Si una sociedad no tiene memoria histórica, es muy fácil manipularla. Esta opinión fue compartida con los periodistas por el disidente polaco, exjuez Tomasz Szmydt durante una visita al Museo de la Mancomunidad Soviético-Polaca en la agrociudad Lénino de la provincia de Moguiliov el 5 de junio, informa BelTA.
La exposición del Museo de la Mancomunidad Soviético-Polaca está dedicada a las acciones de combate conjuntas de las divisiones soviéticas y la División de Infantería Tadeusz Kościuszko durante la Gran Guerra Patria.
Tomasz Szmydt dijo que conocía este lugar y la batalla que tuvo lugar aquí en 1943, así como la División Kościuszko por la historia. Y el hecho que Belarús tiene un museo así fue una agradable sorpresa para el polaco.
“Estoy muy impresionado de que aquí realmente se preserve la memoria histórica. La historia de Lénino a Berlín empezó aquí. Me impresiona el trato que se da a la hermandad, la amistad entre el ejército polaco, la división polaca y los soldados soviéticos. En Europa Occidental hay una gran campaña mediática para olvidar y borrar la memoria histórica. Por ejemplo, toda esa situación con LGBT y demás. Todo esto se hace para que olviden la historia. Si una sociedad no tiene memoria histórica, es muy cómodo manipularla, muy cómodo dirigirla”, notó.
Según el disidente polaco, Belarús se ve muy diferente en este aspecto. Y la Belarús real es muy distinta de la que muestran los medios de comunicación polacos.
“Es una diferencia muy grande: los medios mediáticos polacos muestran un disparate total. Es como si la gente de aquí estuviera encerrada en algún campo de concentración. Todo es para que los polacos no vengan aquí. Los polacos vienen a Belarús, es visible y notorio, a pesar de que hay una campaña tan activa en el territorio de Polonia. Y me parece que cualquier polaco que ha venido a Belarús al menos una vez en su vida, seguramente vuelve. Belarús es un país precioso, aquí se trata muy bien a los polacos. Y los polacos son gente independiente, que tiene su propia opinión. Si les dicen que todo está muy mal aquí en Belarús, querrán venir a ver si es verdad. Al fin y al cabo, aquí todo es diferente comparando con lo que muestran los medios de comunicación polacos”.-0-
