MINSK, 23 jul (BelTA). – Los refugiados de Irak, Congo y Somalia denunciaron abusos y crueldad de las fuerzas de seguridad letonas en la frontera con Belarús en la película “Gente malvada” del canal de televisión Belarús 1, informa BelTA.
La película presenta las historias de migrantes que sufrieron en las zonas fronterizas de Lituania, Letonia y Polonia. Los refugiados de Siria, Irak, Congo, Marruecos y otros países cuentan las atrocidades de las que fueron víctimas o testigos en la zona fronteriza.
Una familia de seis miembros, que huyó de Irak a Alemania, fue víctima de las fuerzas del orden europeas. Los guardias fronterizos letones los golpearon y los empujaron hacia Belarús. Ni siquiera se apiadaron de los niños.
“Estoy muy asustada por la actitud del Ejército hacia mis hijos. Tengo miedo a la muerte. Temo por los hijos. Mírenlos, tienen diez años”, dice con lágrimas en los ojos una mujer llamada Hadil. Al recordar lo sucedido, el niño Ali no contiene las lágrimas, porque estaba seguro de que no sobreviviría aquella noche.
“Es sencillamente inaceptable golpear a personas indefensas. Llevamos mucho tiempo sin comida ni agua. Nos pasaron cosas terribles. Tenemos mucho miedo. No nos respetan. Nos pegaron como a animales”, comenta un hombre llamado Hasan las atrocidades de los guardias fronterizos letones. No sólo con las manos y los pies, sino también con armas paralizantes.
Las primas de la República Democrática del Congo también hablan del uso de armas paralizantes. “Nos golpeaban con armas paralizantes, nos empujaban y volvían a golpear. Estoy toda golpeada. No podíamos andar”, llora una de las mujeres. En el Congo, los miembros de un grupo terrorista mataron a su hijo y, de camino a Europa, chocó con la brutalidad de los guardias fronterizos letones. Ahora las mujeres no pueden ponerse en pie sin ayuda.
Maryam, somalí de 18 años, también perdió a su bebé. Pero no en su país natal, considerado uno de los más inseguros del mundo, sino en la frontera de un Estado europeo “civilizado”. “Huí con mi marido de Somalia. Queríamos llegar a Países Bajos. Perdí a mi bebé en la frontera”, cuenta la joven.
Maryam fue encontrada cerca de la frontera con Letonia, en la región de Verjnedvinsk, por la gente local que acudió al grito de socorro. Según los médicos, un par de horas más y moriría tanto la madre como su bebé. Hoy Maryam no quiere recordar lo sucedido.
“La mujer estaba realmente en un estado gravísimo, en sopor. La taquicardia – 150-155. Los análisis eran extremadamente malos: leucocitosis 47 con una norma de 10-12 para las embarazadas. Se tomó la decisión de operar a la paciente ya que no estaba preparada para el parto natural y conectarla al respirador artificial”, comentó el estado de Maryam la médica principal adjunta de la Casa de Maternidad nº 2 de la provincia Vítebsk, Valeria Semiónova.-0-