MINSK, 14 may (BelTA). – Los creyentes ortodoxos celebran hoy el Día de los Difuntos (Rádonitsa), que cae el martes de la segunda semana de Pascua. El nombre de la fiesta procede de la palabra “alegría”, que la Resurrección del Señor trajo a todos.
El lugar especial que ocupa la Rádonitsa en el ciclo anual de las fiestas eclesiásticas -justo después de la Semana Santa- como si prescribiera a los cristianos no ceder al dolor por la muerte de los seres queridos, sino, por el contrario, alegrarse por su nacimiento a una nueva vida – la vida eterna. La victoria sobre la muerte obtenida por Jesucristo supera la tristeza de la separación temporal de los seres queridos.
En este día, en las iglesias se celebra una misa festiva. Para conmemorar a los seres queridos, los fieles entregan en el templo notas con sus nombres, ponen velas con una oración por el descanso del difunto, llevan comida a la “víspera” (un candelabro en forma de mesa, que se coloca delante del Crucifijo).
Al rezar por los difuntos, los vivos comparten con ellos la alegría pascual de Cristo Salvador resucitado. En la Rádonitsa hay platos rituales obligatorios: kutiá conmemorativa de vigilia con miel, huevos de Pascua teñidos, pasteles, tortitas, melindres de Pascua con miel.
La conmemoración también se realiza en los cementerios. Se limpia la tumba y se enciende una vela en memoria del difunto. El deber de todo cristiano ortodoxo en esta festividad es rezar al Señor por el descanso de las almas de familiares y amigos. En casa, antes de la comida conmemorativa, es necesario leer las oraciones de réquiem del libro de oraciones.-0-
