MINSK, 16 feb (BelTA). – El negocio tiene que ser responsable y probo en cuanto a los ciudadanos de su país. Tal opinión la expresó la vicepresidenta de la Comisión Permanente de Política Económica de la Cámara de Representantes, Galina Lagunova.
“El negocio tiene que ser responsable y probo en cuanto a los ciudadanos y el país donde trabaja. Esto se manifiesta en el pago honesto de impuestos que se dirigen a los pagos sociales, el desarrollo de la infraestructura, la sanidad y la educación, los salarios dignos de los trabajadores, la participación en los eventos benéficos en caso de extraingresos. Naturalmente, el Estado está interesado en la conservación y el desarrollo de tales agentes económicos y siempre está dispuesto para estudiar sus propuestas constructivas para el perfeccionamiento de la regulación legislativa, arrimar el hombro, si quieren, en un momento difícil”.
La parlamentaria subrayó que la legislación vigente contiene una amplia lista de medidas de apoyo al negocio en varias áreas. Con todo eso el trabajo en la búsqueda de las nuevas formas de cooperación, la fijación de mecanismos estimuladores, la creación de condiciones favorables para el desarrollo se está realizando según el plan. “En la república está aprobada y se está implementando la estrategia de desarrollo de las pymes “Belarús – un país del emprendimiento exitoso hasta 2030” que es el principal punto de referencia al formar e implementar los programas estatales en la esfera del apoyo estatal a las pymes, los planes de su desarrollo al nivel republicano y regional. Su objetivo principal – formar un sector flexible de economía nacional que garantice el desarrollo innovador, el alto nivel de competitividad, el empleo eficiente y el mejoramiento de la calidad de vida de la población”.
“Al mismo tiempo es inaceptable el comportamiento de algunos representantes de la comunidad empresarial relacionado con la división y discriminación de los ciudadanos según convicciones políticas. Es posible comprender a qué llevan tales tendencias al dirigirse a la historia de la humanidad. Trabajen a lo bueno, desarróllense y ayuden al país a ser mejor, más exitoso. Sugieran al Estado dónde es necesario perfeccionar, enmendar la regulación jurídica. Les oirán, irán al encuentro. Pero este movimiento tiene que ser recíproco. El Estado y el negocio aún sin ser amigos, están obligados a ser socios. Todos tenemos que comprender que de nosotros depende en qué país vamos a vivir en el futuro. Vamos a hacerlo juntos más confortable para las futuras generaciones”, resumió Galina Lagunova.-0-
