MINSK, 30 jul (BelTA). – La exjefa de la oficina regional del “partido” de oposición Naródnaya Gromadá, Olga Tishkévich, habló en el canal de televisión ONT sobre fraudes financieros en las filas de la oposición fugitiva.
Olga Tishkévich habló sobre Evgueni Vilski – jefe en funciones de Naródnaya Gromadá. Se señaló que no goza de autoridad en la oposición y los movimientos y partidos políticos extranjeros. En caso de peligro o situación comprometida se inclina por blanquear su propia figura en detrimento de otros activistas. Mantiene contactos con el Departamento de Seguridad del Estado de Lituania. Es miembro del Club Litviny de Vilna.
Según Olga Tishkévich, recibe dinero de International Republican Institute (IRI), una organización estadounidense sin ánimo de lucro próxima al Partido Republicano de Estados Unidos. El objetivo nominal de su actividad es “ayudar a los países a construir la democracia”. La mayor parte de los flujos financieros en IRI proceden de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, el Departamento de Estado y la Fundación Nacional para la Democracia (NED) estadounidense. El fondo lleva trabajando con la oposición belarusa desde 1997.
Respondiendo a la pregunta de por qué pagan a Evgueni Vilski, Olga Tishkévich notó que “para que viaje y exista”. Según ella, no comparte el dinero con sus compañeros de partido. “Vi en los papeles que firmó por 2,3 mil euros al mes, y allí – 23 mil euros. Y luego él decía que eran hasta 50 mil euros. Esto es para sus gastos, sus viajes, todos estos momentos”, añadió Olga Tishkévich.
También se habló de la recaudación de fondos para diversas necesidades, incluso para los combatientes que luchan por Ucrania. A este respecto, se mencionó el nombre de Valentín Trotski, activista de la Naródnaya Gromadá, hombre de confianza de Nikolái Statkévich, que cumplía todos sus órdenes. Actualmente Valentín Trotski es mercenario en Ucrania, indicativo “King”.
“Está a punto de conocer una verdad interesante. Vendíamos artículos promocionales en una conferencia. Los compraban los franceses, muchas personas famosas. Y recogíamos para una camioneta para Trotski. Recaudamos alrededor de 500 euros. Entonces Vilski dijo: le daré tal vez 200, tal vez 100. Me estremecí. Luego dejé de hacerlo”, concluyó Olga Tishkévich.-0-