MINSK, 9 may (BelTA). – Belarús celebra hoy una de las fiestas más importantes en la historia del país – el Día de la Victoria. Para los habitantes de la república, no es sólo un día festivo, sino también un día de la memoria, profundo respeto y gratitud a los soldados soviéticos, trabajadores de la retaguardia, partisanos y clandestinos – a todos los que acercaban la Victoria.
Hace 77 años, el 9 de mayo de 1945, se alcanzó la Victoria en la Gran Guerra Patria, que duró 1418 días y noches. El pueblo soviético desempeñó un papel decisivo en la lucha contra el fascismo y llevó sobre sus hombros la principal carga de la guerra, determinando el futuro de toda la civilización mundial.
Belarús fue la primera de las repúblicas de la URSS en exponerse al ataque masivo de los invasores fascistas, convirtiéndose en el escenario de las batallas más grandes. Los guardias fronterizos y las unidades avanzadas de las tropas de cobertura fueron los primeros en rebatir la ofensiva del enemigo. Los aviones enemigos bombardearon nudos ferroviarios, aeródromos, así como Brest, Grodno, Volkovysk, Baránovichi y otras ciudades belarusas.
Sin embargo, a pesar del coraje y el heroísmo, el territorio de Belarús a principios de septiembre de 1941 fue ocupado por los alemanes. Después del comienzo de la ocupación, en Belarús se desarrolló una resistencia al enemigo sin precedentes en su carácter de masas y tenacidad. La principal forma de lucha nacional fue el movimiento guerrillero, en el que durante los años de la Gran Guerra Patria participaron más de 374 000 partisanos, la clandestinidad antifascista contó con más de 70 000 personas. En los destacamentos guerrilleros junto con los belarusos lucharon los representantes de diferentes pueblos de la Unión Soviética y los antifascistas de los países europeos. Durante los años de guerra, hubo alrededor de 30 zonas partisanas, cuyo territorio los alemanes no lograron ocupar.
Durante la guerra, el enemigo destruyó 209 ciudades y pueblos, 9200 aldeas en el territorio de Belarús. Los nazis destruyeron más de 100 000 empresas, eliminaron miles de instituciones educativas y médicas. Los nazis llevaron a cabo más de 140 operaciones punitivas en Belarús. La aldea de Khatyn se convirtió en un símbolo trágico del exterminio masivo de la población civil, allí fueron matados 149 habitantes y quemados 28 hogares.
En el territorio de Belarús había unos 250 campos de prisioneros de guerra soviéticos y 350 lugares de detención forzosa de la población. Entre ellos se encuentra el cuarto campo de exterminio más grande de Europa – Trostenéts, donde murieron 206 500 personas.
Durante los años de guerra en las hostilidades participaron 34,4 millones de militares soviéticos, incluidos más de 1,3 millones de belarusos y nativos de Belarús. Según los investigadores modernos, durante la Gran Guerra Patria murieron de 2,5 a 3 y más millones de habitantes de Belarús.
En los anales de Belarús no hubo batalla más cruel que la Gran Guerra Patria, no hubo hazaña más significativa que la hazaña del soldado soviético que defendió a la Patria del enemigo y salvó a la humanidad del nazismo. La memoria de la terrible guerra y la Gran Victoria no se puede desvanecer: está inscrita para siempre en la historia de la Patria y de cada familia belarusa. La tragedia vivida y la Victoria alcanzada es una fuente eterna de dolor y amargura, orgullo y gloria del pueblo belaruso.
El tiempo nos aleja cada vez más de los acontecimientos de la Gran Guerra Patria, pero las hazañas de los muertos en batallas, la tristeza de millones de víctimas inocentes y la tragedia de la ocupación permanecen en la mente de las generaciones anteriores, se guardan en la memoria de sus hijos, nietos y bisnietos.
Este año, 150 eventos, acciones, proyectos, concursos, carreras automovilísticas en todo el país están dedicados al Día de la Victoria en la Gran Guerra Patria. El 9 de mayo, durante la acción republicana “Belarús Recuerda”, tendrá lugar una procesión de generaciones. Sus participantes irán al Monumento a la Victoria y depositarán ofrendas florales. Por primera vez, los veteranos no participarán en la procesión, pero estarán presentes en el sitio ritual al lado del Monumento a la Victoria. La columna estará encabezada por los estudiantes y alumnos. La fiesta coronará con un concierto festivo en la Plaza de la Victoria. Tradicionalmente a las 23.00 horas el punto final de la fiesta serán los fuegos artificiales.-0-
