REGIÓN DE MOGUILIOV, 4 ene (BelTA). – Las obras de caridad conforman nuestro espacio y nuestro futuro. Esta opinión fue compartida con los periodistas por Alekséi Talái, paralímpico y fundador de la fundación benéfica, durante su diálogo con los niños de la República Popular de Lugansk, que llegaron a la provincia de Moguiliov para pasar las vacaciones de Año Nuevo y hacer rehabilitación, informa BelTA.
“Hoy hablaremos al alma con los niños, responderé a sus preguntas, contaré de mi familia y de mis hijos, de lo difícil que fue mi camino, de lo mucho que tuve que superar. Tal diálogo personal es muy importante”, dijo.
Alekséi Talái señaló que los belarusos siempre están dispuestos a ayudar a los necesitados. Especialmente cuando se trata de niños. Los belarusos les dan su calor, regalos. Todo esto es posible gracias al apoyo de los socios, que nunca se quedan al margen. Decenas de toneladas de cargamentos humanitarios de Belarús se envían a los territorios de las Repúblicas Populares de Donetsk y de Lugansk, al Orfanato de Mariúpol. “Vamos a los lugares más difíciles y peligrosos. Pero allí conocen a los belarusos, nuestro proyecto benéfico. Esto es importante y fundamental. Al fin y al cabo, estamos escribiendo la historia moderna del pueblo belaruso, nuestra participación en los acontecimientos mundiales. Demostramos que siempre estamos dispuestos a ayudar. Estamos dispuestos a ayudar a la gente, los niños, dondequiera que estén”, subrayó.
No sólo las empresas y organizaciones públicas, sino también los ciudadanos de a pie del país se unen a la ayuda benéfica. Ya que ayudar a los demás es la felicidad, cree Alekséi Talái. “La familia que recogió el paquete le pegó una hoja con la inscripción “De los belarusos con amor”, allí dibujan corazones, flores, nuestra bandera nacional. A través de nosotros lo envían a los destinatarios. La gente lo recordará durante muchos años. Tales obras de caridad conforman nuestra base de una familia individual y de todo el país. Esas obras de caridad conforman nuestro espacio y nuestro futuro”, concluyó.
Para la rehabilitación a la provincia de Moguiliov llegaron 35 niños de la Escuela-Internado Especial de Antratsit. Los niños están alojados en el sanatorio Dubróvenka. Aquí se someten a los tratamientos médicos, consultas, y según sus resultados, a una niña se le hace un corsé, a 9 niños más – gafas. Cada día está lleno de eventos diversos, viajes, comunicación con los invitados. Y, por supuesto, el Año Nuevo es la época de milagros, cumplimiento de deseos y regalos.
Los niños esperaban a Alekséi Talái con impaciencia. Mostraron cómo se habían instalado, presumieron de los regalos recibidos, contaron sus impresiones sobre sus vacaciones en Belarús. Abrazos cálidos y muchas sonrisas: el encuentro resultó muy emotivo.
Entre los que vinieron a la provincia de Moguiliov está la niña Kristina. “Nos recibieron muy bien, nos dieron una gran tarta, nos recibieron con canciones y bailes. Cada día tenemos nuevas impresiones. Aquí nos acogen muy bien, se siente que nos esperaban mucho. Todo el mundo nos trata con cuidado y atención. Es muy agradable”.
La niña Ania vino con ella. Dice que le gusta mucho Belarús. “Desde el primer día nos examinaban los médicos, recibimos tratamientos, comemos bien. Fuimos a Minsk, estuvimos en la función de Año Nuevo en Moguiliov. Aquí tenemos una verdadera fiesta. Me gusta mucho. Todos los niños están muy agradecidos por todo. Y me encantaría volver aquí”, dijo.
Los niños permanecerán en la provincia de Moguiliov hasta el 10 de enero.
Además del encuentro con niños de la República Popular de Lugansk, Alekséi Talái habló en Moguiliov con los representantes de una de las empresas de la ciudad. Durante la reunión se habló de la situación actual en el mundo y en el país, se plantearon cuestiones importantes. Una de ellas fue la próxima campaña electoral. Alekséi Talái subrayó la importancia de este evento y llamó a todos a tratar las elecciones con responsabilidad.-0-
