REGIÓN DE LÚNINETS, 13 jul (BelTA). – El 13 de julio, el Presidente de Belarús, Aleksandr Lukashenko, visitó la base de estacionamiento del 56º regimiento de cohetes antiaéreos en la región de Lúninets, provincia de Brest, informa BelTA.
En primer lugar, el Jefe de Estado acudió al puesto de mando del regimiento, donde le informaron sobre el cumplimiento de las tareas de combate de defensa antiaérea.
Después se trasladó al cuartel general del regimiento. Aleksandr Lukashenko recorrió el territorio, se familiarizó con la infraestructura. También visitó el parque automovilístico del regimiento. El ministro de Defensa dio explicaciones.
En el cuartel general se organizó una reunión sobre la seguridad militar del país en la dirección operativa sur. En la reunión participaron el secretario de Estado del Consejo de Seguridad de Belarús, Aleksandr Volfóvich, el presidente del KGB, Iván Tértel, el ministro del Interior, Iván Kubrakov, el ministro de Defensa, Víktor Jrenin, el jefe del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas, Pável Muraveiko, el presidente del Comité Fronterizo Estatal, Konstantín Mólostov, el comandante de las Fuerzas de Operaciones Especiales de las Fuerzas Armadas, Vadim Denisenko, el comandante de las Fuerzas Aéreas y de Defensa Antiaérea, Andréi Lukianóvich.
Como ya informó BelTA, la situación en las fronteras del sur es uno de los temas candentes de los últimos tiempos. Aleksandr Lukashenko habló largo y tendido sobre las cuestiones relevantes en la reunión solemne dedicada al Día de la Independencia, el 2 de julio. “En ningún caso debemos permitir una escalada ni un agravamiento. Quiero que los dirigentes ucranianos escuchen esto. La concentración de fuerzas armadas, aunque sean nada, es muy peligrosa durante las operaciones militares. Analizamos la situación. Entendemos perfectamente que no necesitamos ninguna escalada. Siempre hablamos de esto. Los ucranianos entienden que responderemos”, dijo el Jefe de Estado.
Aleksandr Lukashenko pidió a los ucranianos que no jugaran con el fuego. “Es muy peligroso”, dijo.
Según el mandatario, los guardias fronterizos belarusos extremaron la vigilancia de la frontera estatal. Se desplegaron fuerzas de operaciones especiales y otras unidades de inteligencia. Además, las tropas de las Fuerzas Aéreas y de Defensa Antiaérea tanto de Belarús como de Rusia se encontraban en estado de máxima alerta. Los sistemas de misiles Polonez e Iskander fueron puestos en posición.
“Ningunas líneas rojas. Atacaremos con todo tipo de armas”, lanzó otra advertencia el líder belaruso.
Al mismo tiempo, el Presidente llamó a la población a no preocuparse innecesariamente y volvió a pedir, como tantas otras veces, que todo el mundo se dedicara tranquilamente a sus asuntos. “Les garantizo que no permitiremos ningún enfrentamiento en la frontera con Ucrania. No los habrá”.
