MINSK, 9 ene (BelTA). – El Presidente de Belarús, Aleksandr Lukashenko, subrayó la importancia de preservar la soberanía cultural del pueblo belaruso. Lo declaró en la ceremonia de entrega del premio “Por el renacimiento espiritual”, el premio especial para las personalidades de la cultura y el arte y el premio “Olimpo deportivo de Belarús”, informa BelTA.
“Nosotros, los belarusos, somos creadores por naturaleza. Vivimos desde el tiempo inmemorial con nuestra propia mente, por eso preservamos nuestro modo de vida, cultura y espiritualidad en los periodos más difíciles del desarrollo. Esto es muy importante. Muchas personas hoy en día, especialmente nuestros fugitivos, gritan sobre la “decadencia” de la espiritualidad y la cultura. No habrá ninguna “decadencia” si mostramos a nuestro pueblo las obras maestras de esta creatividad. Nadie estrangulará a nadie por la creatividad. Esto nunca ocurría en nuestra historia moderna y nunca ocurrirá. Pero no permitiremos destruir lo que fue creado y desarrollado por generaciones de belarusos durante siglos: nuestras tradiciones, nuestra espiritualidad y los sentimientos más elevados se basan en el pasado. Y no debemos destruirlo. Tampoco debemos politizarlo demasiado”, afirmó el líder belaruso.
Al mismo tiempo, según el mandatario, Belarús está abierta al mundo, respeta las costumbres y tradiciones de otros pueblos, es receptiva a nuevas ideas. “Pero con una condición: todo lo que llega a nuestra vida, a la de los belarusos, debe resonar, corresponder a nuestros valores nacionales, al mundo espiritual, y enriquecer culturalmente a nuestra nación”.
Aleksandr Lukashenko subrayó que el futuro de la nación depende del ejemplo personal de todos los participantes e invitados a la ceremonia, de su posición cívica y su elección profesional: “No hace falta explicar lo importante que es preservar nuestra soberanía cultural. Naturalmente, comienza con una actitud cuidadosa hacia la pureza de la lengua materna (rusa y belarusa), dando prioridad al contenido tradicional de los proyectos creativos y fiestas, al diseño tradicional de nuestro producto nacional y todo el espacio vital”.
El Jefe de Estado calificó de cuestión de dignidad nacional el profundo respeto por la cultura autóctona, creada por los maestros populares, la clásica soviética y belarusa: “Nunca debemos renunciar a lo que conseguimos. Porque surgirá la pregunta: ¿a qué herencia renunciamos y sobre qué vamos a construir nuestro futuro?”
Aleksandr Lukashenko deseó éxitos tanto creativos como industriales a todos los habitantes de Belarús: “Seguiremos aspirando a la perfección y un nivel digno de nuestra vida cultural, espiritual, social y política”.
El Presidente agradeció a los galardonados su contribución al desarrollo de su Belarús natal y les entregó personalmente los diplomas.-0-
