MINSK, 3 sep (BelTA). - El Presidente de Belarús, Aleksandr Lukashenko, considera que hay partes interesadas en la continuación del conflicto en Ucrania, lo señaló en la Conferencia Internacional para la Lucha contra el Terrorismo, anuncia BelTA.
“¿Por qué no cesaron este conflicto hasta ahora (ya pasaron cinco años)? Porque lo necesita alguien”, acentuó el líder belaruso.
El Jefe de Estado señaló que las propuestas de la regulación pacífica de parte de Belarús fueron rechazadas, el conflicto continuó.
“Todos nosotros sufrimos por el conflicto en Ucrania. Es un problema doloroso para mí. Cuando empezó este conflicto, uno de los altos funcionarios me llamó y se interesó qué vamos a hacer, por la opinión de Belarús. No quería intervenir en el asunto sabiendo qué está pasando y qué era causa del conflicto”, agregó Aleksandr Lukashenko.
Al mismo tiempo la parte belarusa preparó y propuso un plan de actividades concretas que tendrían que ser realizadas a relación del conflicto empezado. “Agregué: si dan la espalda a este plan, donde la carga principal la tendría Belarús, consideraré que Europa no quiere que el conflicto cese. La Europa civilizada lo rechazó. Hasta en detalles”, constató el mandatario belaruso.
“Empezaron a luchar por Donbás, Crimea, algo más, en el marco de los formatos de Normandía, incluso en Belarús. Claro que les acogía con placer porque sabía que eran unos pasos pequeños en la normalización de la situación. Es que allí morían ancianos y niños, posiblemente fallecen ahora”, agregó el Jefe de Estado.
El Presidente notó que cuando había empezado el conflicto en Ucrania muchos en Belarús le reprochaban: no hace falta meterse en el conflicto ajeno. “En primer lugar, las personas próximas chocaron allí. Segundamente, eso es a nuestro lado. Tuvimos gran afluencia de migrantes el primer año: llegaron 150 000 personas. Los europeos no pueden dividir dos mil migrantes en el mar. Así es la Europa democrática. En el mar está la gente que huye de los problemas que existen en su Patria. Nosotros, Europa, no la acogemos porque no son de nuestros. A Belarús llegaron 150 000 personas y no eran ajenas. Al cabo de unos días firmé un edicto para darles iguales posibilidades en Belarús respecto a la vivienda, educación, guarderías, escuelas… Les ofrecimos trabajo. Daba miedo acoger a esos 150 mil teniendo nuestros propios problemas. Nadie nos ayudó. Nosotros mismos no pedimos tal ayuda”, comentó el estadista belaruso.
Pero lo más horrible, continuó el Presidente, era lo que después Belarús tenía que “cerrar la frontera”. “Teníamos que cerrar la frontera con nuestros hermanos, cerrarla a piedra y lodo, aun más que la frontera con la OTAN, que siempre nos parecía un enemigo principal. Cerramos la frontera con nuestras personas próximas, es que empezaron a entrar las armas. Si las personas ordinarias tienen armas, puede surgir el terrorismo. Y la Belarús tranquila puede recoger frutos y recibir algo para que no tenemos motivos”, relató Aleksandr Lukashenko.
“¿Quién lo engendró? La respuesta está a flote”, resumió el estadista.-0-
