MINSK, 6 dic (BelTA). – El Presidente de Belarús, Aleksandr Lukashenko, pidió al Presidente de Rusia, Vladímir Putin, desplegar en el territorio del país el moderno sistema ruso Oréshnik. La correspondiente propuesta fue expresada por el Jefe de Estado en el Consejo Supremo del Estado de la Unión en Minsk, informa BelTA.
El Jefe de Estado señaló que Belarús está muy preocupada por la situación en Europa Occidental, especialmente cerca de las fronteras con Polonia y Lituania. “Lo consideramos un peligro incluso mayor que el de la beligerante Ucrania”, subrayó. El Presidente señaló que las tropas de Polonia, Lituania están desplegadas muy cerca de la frontera belarusa, mientras que las Fuerzas Armadas de la OTAN de otros Estados, incluida Alemania, se están acumulando allí. “Es decir, la situación es muy tensa. Polonia gasta enormes recursos en armar a su ejército. Si quieren vivir en paz con nosotros, como afirman, ¿por qué gastan miles de millones de dólares en armamento? En resumen, estamos muy alarmados. Y ya es una amenaza para nuestro grupo militar.
En este sentido, el Presidente se dirigió a Vladímir Putin: “Me gustaría pedirle públicamente que despliegue los nuevos sistemas de armas, y en primer lugar Oréshnik, en el territorio de Belarús. Esto calmaría seriamente algunas “cabezas”, que ya están listas para guerrear con Belarús”. En su opinión, dicho despliegue también es conveniente en el marco de la Doctrina de Seguridad recientemente adoptada y del Tratado de Garantías de Seguridad en el Estado de la Unión.
“Tenemos ciertos lugares donde podemos desplegar estas armas. Con una sola condición: que los objetivos de estas armas sean determinados por la dirección político-militar de Belarús. Mientras ustedes nos enseñen a usar estas armas, si se hace, que los especialistas de la Federación de Rusia den servicio y hagan lanzamientos de Oréshnik a determinados objetivos. Ustedes saben cómo hacerlo, lo han demostrado recientemente”, dijo Aleksandr Lukashenko.
Según él, esto reforzaría significativamente la defensa del Estado de la Unión y, por supuesto, del territorio belaruso.
El Presidente señaló que, tras el despliegue de armas nucleares tácticas rusas en Belarús a petición suya, a menudo se oyen reproches. En el caso de Oréshnik, no habrá motivo para tales reproches, ya que no se trata de un arma nuclear. Aunque en determinadas condiciones los daños causados por Oréshnik son comparables a los de un ataque nuclear, pero sin contaminación radiactiva del territorio.
Aleksandr Lukashenko subrayó que lo pedía no sólo en su nombre, sino también en el de todo el pueblo belaruso.-0-