MINSK, 12 sep (BelTA). - El Presidente de Belarús, Aleksandr Lukashenko, destacó las perspectivas de desarrollo de la capital durante la ceremonia de inauguración del reconstruido complejo histórico y cultural Lóshitski, informa el corresponsal de BelTA.
El Jefe de Estado acentuó que en Belarús se presta especial atención a la conservación y reconstrucción de los objetos históricos, y el complejo Lóshitski es uno de esos ejemplos. “Mi política, y por lo tanto la suya, es crear y conservar. Aquí conservamos nuestro patrimonio cultural, restauramos, construimos. Y seguiremos haciéndolo”, mencionó Aleksandr Lukashenko.
El Presidente agradeció a todos los que participaron en la reconstrucción, construcción y acondicionamiento del complejo, y expresó su deseo de que se convierta en un centro de atracción para los habitantes y visitantes de la capital, donde puedan descansar y pasar tiempo con sus hijos. Aquí hay todo lo necesario para ello: un territorio acondicionado, hoteles, restaurantes, salas y zonas para celebrar diversos eventos. Sin embargo, aún quedan por reconstruir algunos edificios. Por ejemplo, el edificio del antiguo molino.
Aleksandr Lukashenko considera que se debe conservar su antigua función y organizar aquí precisamente un molino. Esto permitirá atraer a turistas y jóvenes. “Si moliéramos aquí el grano cosechado en Belarús y ofreciéramos este pan a la gente, estoy seguro de que vendrían de Rusia a comprarlo”, notó el Presidente. Como ejemplo, el Jefe de Estado citó la panadería restaurada en su patria chica, en el pueblo de Kopys, donde ahora se hornea un pan muy sabroso que tiene una gran demanda, por lo que incluso vienen a comprarlo desde las ciudades y pueblos vecinos.
Aleksandr Lukashenko señaló que, a principios de la década de 1990, el complejo Lóshitski estaba abandonado y podía desaparecer por completo. Sin embargo, el Presidente tomó la decisión de conservarlo y restaurarlo, lo cual se llevó a cabo. Actualmente, hay instalaciones destinadas a personas de diferentes generaciones e intereses. Por ejemplo, los restaurantes son más importantes para los jóvenes.
El Presidente señaló que las obras de mejora se están llevando a cabo en todo Minsk y en todo el país, y que continuarán. “En Minsk, no solo en este Año de la Mejora, sino también en los próximos años, estamos decididos a poner orden de esta manera (BelTA: como en el complejo Lóshitski), y luego ustedes mismos mantendrán este orden. Y haremos todo lo posible para que tengan un lugar donde venir y descansar”, dijo.
Aleksandr Lukashenko contó que, al reflexionar sobre el desarrollo de la capital, a veces se preocupa por si está haciendo que la ciudad sea demasiado “rural”, teniendo en cuenta que aquí no hay tantos edificios característicos de las grandes metrópolis industriales, sino más zonas verdes y espacios para las personas. “Quizás alguien muy joven piense: nos vendrían bien más “vidrio” y “hormigón”. Pero cuando llegan los niños (y eso ocurre muy rápido), entonces se comprende lo que es esto: poder salir tranquilamente con un niño a algún sitio”, señaló.
“Creo, Vladímir Evguénievich, que no debemos apresurarnos a construir en Minsk, a construir donde nuestros empresarios quieren construir viviendas”, señaló el Presidente, dirigiéndose al jefe del Comité Ejecutivo de la ciudad de Minsk, Vladímir Kújarev. El Jefe de Estado subrayó que la política en materia de construcción de viviendas en Minsk ya está definida y seguirá siendo la misma: la construcción de viviendas en la capital corre a cargo de empresas estatales que pueden garantizar la ejecución de las obras y evitar cualquier tipo de manipulación o sobrecoste, como ocurría anteriormente con algunos particulares. Los inversores privados también tienen oportunidades en Minsk, pero solo si están dispuestos a asumir la carga social, aportar las últimas tecnologías y atraer importantes recursos financieros. Así ocurrió, por ejemplo, con el inversor que está construyendo en la capital Séverny Béreg y, junto con él, el Centro Internacional de Exposiciones. “Quien traiga algo a Belarús, será bienvenido”, subrayó Aleksandr Lukashenko.
La política del Jefe de Estado con respecto al futuro desarrollo de Minsk seguirá siendo la misma en el futuro: no se puede sobrepoblar ni llenar de “vidrio y hormigón”.
“No creo que a la gente le resulte muy cómodo y le apetezca vivir en esos rascacielos de cristal. Por eso detengo un poco a Minsk (BelTA: en términos de aumento de la concentración de población y la densidad de construcción), para que haya naturaleza... Si vives en un edificio de muchos pisos, para que puedas venir con los niños. Haremos todo lo necesario para que estén cómodos”, explicó el estadista.
Con todo eso el Presidente se dirigió a los constructores que participaron en la reconstrucción del complejo, les agradeció su trabajo y, en su nombre, elogió a todos los representantes del sector en general.
“Nuestros constructores hoy en día saben hacer de todo”, afirmó. Los especialistas en construcción nacionales también tienen demanda en el extranjero, incluso en Rusia, debido a su alto nivel de cualificación y profesionalidad. “Es muy positivo que los constructores hayan conservado su escuela soviética. En Belarús había centros donde se enseñaba a construir y en qué dirección se desarrollaría la construcción a toda la gigantesca Unión Soviética. En gran medida, lo hemos restaurado y multiplicado. Es un gran mérito”, subrayó Aleksandr Lukashenko.
Señaló que la demanda de especialistas belarusos obliga a los directores de las empresas constructoras a aumentar los salarios de los trabajadores para evitar la fuga de personal. “Solo hay que entender que, si quieres ganar mucho, tienes que trabajar mucho. No hay otra opción. Ningún Presidente ni alcalde te dará otra receta”, señaló el Jefe de Estado.-0-
