ASTANÁ, 4 jul (BelTA). – El día de la adhesión de Belarús a la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS) pasará a la historia del país. Lo declaró el Presidente de Belarús, Aleksandr Lukashenko, en la reunión del Consejo de Jefes de Estado de los países miembros de la OCS en Astaná, informa BelTA.
El Presidente expresó su gratitud a los anfitriones de la cumbre -la parte kazaja- por la excelente organización de la reunión y la cálida acogida en Astaná. “Gracias, entre otras cosas, al éxito de su presidencia, este día pasará a la historia de Belarús como la fecha del ingreso de nuestro país en la Organización de Cooperación de Shanghái”, dijo el mandatario belaruso.
Aleksandr Lukashenko calificó de significativo y simbólico que el año de ingreso en la OCS coincidiera con el 80 aniversario de la liberación de Belarús de los invasores nazis. “Es un regalo maravilloso para el pueblo belaruso”, dijo el Jefe de Estado.
El Presidente también agradeció a los demás colegas -Jefes de Estado de la OCS- el apoyo unánime a esta decisión.
El mandatario habló de las áreas específicas a las que Belarús, como participante de pleno derecho, tiene previsto prestar especial atención. Aseguró que el país está dispuesto a trabajar codo con codo con la nueva presidencia (después de Kazajistán, China asumirá la presidencia de la OCS) en la aplicación de las prioridades conjuntas.
Sobre la seguridad internacional
“Estamos profundamente convencidos de que es necesario construir una seguridad mundial genuina e indivisible en el siglo XXI. La iniciativa deben tomarla los países de la mayoría global, ya que Occidente, narcisista y egoísta, se mostró incapaz de eso. Allí no hay líderes capaces de tomar decisiones responsables independientemente”, notó Aleksandr Lukashenko.
Por su parte, aseguró, Belarús intentará adaptar sus iniciativas en este ámbito, el más urgente para sus socios en la actualidad.
Sobre la economía
El Jefe de Estado afirmó que los socios de la OCS ya tienen proyectos mutuamente beneficiosos en energía, transporte y logística, finanzas y cooperación industrial. “Si elaboramos unas reglas claras en nuestra plataforma, todos saldremos ganando, incluidos los que están fuera de la región de responsabilidad de la OCS”.
Sobre la seguridad alimentaria
Al hablar de la seguridad alimentaria, Aleksandr Lukashenko señaló que los retos en este ámbito no sólo proceden de factores tradicionales, como el cambio climático y las catástrofes naturales, sino también de barreras artificiales, como las sanciones ilegales a los fertilizantes minerales, la maquinaria, los productos fitosanitarios y las rutas de suministro. Como consecuencia, la población de los países en desarrollo, incluidas las naciones más pobres de Asia, África y América Latina, se ve obligada a pasar hambre.
“Somos capaces de derribar los muros del mundo unipolar, alimentar a la gente eliminando muchas contradicciones y conflictos debidos a la desigualdad social y a la escasez de alimentos y recursos”, acentuó.
Sobre el posicionamiento internacional
“Nos esforzaremos por hacer crecer la autoridad de nuestra organización, ampliar el círculo de sus aliados y partidarios”, aseguró Aleksandr Lukashenko.
Señaló que muchas ideas belarusas, expresadas anteriormente, ya recibieron apoyo internacional. Esto se aplica a la transferencia de tecnología, la seguridad de la información, el transporte y la logística, la industria, el comercio y la inversión.
“Ahora, en nuestro nuevo estatus, nos esforzaremos por vincular al máximo nuestras propuestas con las iniciativas de nuestra organización”, afirmó el estadista.
Sobre el enriquecimiento mutuo de las culturas
“Belarús inicia su labor en la Organización de Cooperación de Shanghái entendiendo que la OCS no es sólo seguridad, economía y comercio. Es también enriquecimiento mutuo de culturas, que conducirá a un acercamiento indispensable de nuestros pueblos”, dijo el líder belaruso.-0-