MINSK, 4 abr (BelTA). – Los enfoques de derechos humanos que se imponen por el Occidente en las Naciones Unidas (ONU) generan hostilidad entre los países. Lo declaró la representante permanente de Belarús ante la Oficina de las Naciones Unidas en Ginebra Larisa Bélskaya comentando el estudio por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU del proyecto de resolución sobre Belarús, dieron a conocer a BelTA en la misión diplomática belarusa.
El proyecto de resolución fue iniciado por un grupo de estados occidentales encabezado por la Unión Europea (UE). Larisa Bélskaya destacó que Belarús rechaza a esta resolución.
“Las metas de este documento son evidentes: la promoción en la ONU exclusivamente de la versión y evaluaciones occidentales de la situación en Belarús, la justificación de la presión sobre nuestro país por medio de las sanciones unilaterales de los países occidentales, la aspiración a lograr cambiar las autoridades legítimas y el curso político del estado belaruso”, subrayaron en la representación.
La representante permanente de Belarús hizo hincapié en que los enfoques occidentales en el campo de derechos humanos que se imponen al Consejo de la ONU, la tutoría moral sobre las vías de desarrollo de la democracia están provocando una actitud discriminatoria hacia algunos estados, generan situaciones de conflicto y hostilidad entre los países.
La diplomática belarusa llamó al Consejo de la ONU a prestar debida atención al cumplimiento con poca conciencia por las así llamadas “democracias maduras” de sus obligaciones internacionales propias en el campo de derechos humanos cuyas violaciones en los países occidentales incrementaron bastante últimamente.
La representante permanente de Belarús también subrayó que la política ilegal de sanciones de la Unión Europea, Estados Unidos y sus satélites está golpeando sin piedad contra los derechos económicos y sociales de millones de personas en todo el mundo. “Precisamente las sanciones poco pensadas del Occidente contienen las causas de las crisis alimentaria y energética pronosticadas por la ONU, sus devastadoras consecuencias humanitarias a largo plazo”, hizo hincapié Larisa Bélskaya.
La diplomática belarusa subrayó que Belarús sigue siendo abierta para un diálogo basado en igualdad de derechos y respeto mutuo en el campo de derechos del hombre, pero no acepta la política de presión y ultimatos.-0-
