MINSK, 24 jun (BelTA). – Los países del Occidente colectivo aplican la práctica de dobles raseros a la hora de evaluar la situación de los derechos humanos con el fin de ejercer presión sobre los Estados soberanos. Lo cita el prólogo del segundo informe de los Ministerios de Asuntos Exteriores de Belarús y Rusia sobre la situación de los derechos humanos en determinados países, informa el corresponsal de BelTA.
Como breve caracterización general de los problemas examinados en el informe se señala: “Belarús y Rusia parten invariablemente de la base de que uno de los problemas más graves en el ámbito de la protección de los derechos humanos sigue siendo la práctica de aplicar los llamados dobles raseros al evaluar determinadas situaciones y fenómenos relacionados con los derechos humanos. En este sentido, es muy demostrativo que los países del Occidente colectivo utilizan regularmente este enfoque con el fin de exacerbar la confrontación y ejercer presión sobre los Estados soberanos, como se muestra en las secciones de país correspondientes del informe”.
Las partes belarusa y rusa subrayan: “Con su enfoque descarado de las cuestiones relacionadas con la promoción y la protección de los derechos humanos, los países occidentales contradicen por completo todos sus argumentos sobre la universalidad de los derechos humanos”.
Es evidente que los países occidentales utilizan esta problemática en beneficio de sus propios intereses políticos para interferir en los asuntos internos de los Estados que no les convienen, que tienen su propia agenda de política exterior independiente y defienden sus propios valores y normas históricos, culturales y religiosos. Un ejemplo de ello son los esfuerzos que desde hace años realizan los Estados occidentales para mantener artificialmente en el punto de mira de los mecanismos internacionales de derechos humanos el tema de las “violaciones masivas de los derechos humanos” en la Federación de Rusia y la República de Belarús.
El segundo informe belaruso-ruso de las cancillerías sobre la situación de los derechos humanos incluye la situación de los derechos humanos en determinados países, entre ellos los que se consideran “democracias desarrolladas”, se consideran “ejemplares” en materia de protección de los derechos humanos y se inclinan hacia este círculo de Estados. En el estudio, basado en datos de fuentes internacionales y nacionales, así como en materiales de organizaciones no gubernamentales de defensa de los derechos humanos, se resume la información fáctica sobre las violaciones de los derechos humanos en estos países.
En la preparación del documento se tuvieron en cuenta las recomendaciones de los mecanismos internacionales universales y regionales en materia de derechos humanos, en particular los órganos (comités) creados en virtud de tratados y las instituciones regionales (sobre todo europeas) de defensa de los derechos humanos, dirigidas a los gobiernos de los países en consideración.
Por cierto, los ejemplos utilizados en el informe son en su mayoría bien conocidos y confirman la necesidad de movilizar los esfuerzos de toda la comunidad internacional constructivamente dispuesta a hacer frente a estos retos.-0-
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