Las previsiones de los expertos sobre la intensificación de las relaciones con Myanmar aparecidas en el ámbito informativo nos incitan a examinar más de cerca y en profundidad la situación en este país del Sudeste Asiático, miembro del bloque de la ASEAN, y sus alrededores. Los principales actores regionales, por regla general, adoptan una actitud de espera y, por si acaso, establecen canales de comunicación con todos los participantes del conflicto armado, que volvió a estallar en febrero de 2021. Yuri Yarmolinski, jefe adjunto del Departamento de Política Exterior del Instituto de Estudios Estratégicos de Belarús, compartió con BelTA su opinión sobre los escenarios en los que puede desarrollarse la crisis en Myanmar y qué contribución puede hacer Belarús al proceso de paz y al desarrollo sostenible de este país en el futuro.
Situación política interna en Myanmar
Hablando de la situación interna, el experto señaló que el conflicto armado entre las Fuerzas Armadas de Myanmar (Tatmadaw) y la Fuerza de Defensa del Pueblo, subordinada al Gobierno de Unidad Nacional (NUG) en el exilio, así como los grupos étnicos armados unidos a ella, que volvió a estallar en febrero de 2021, está lejos de terminar.
“Bajo la presión de Occidente, de los países vecinos y de los socios de la ASEAN, el régimen militar de Myanmar está inmerso en un complejo juego de supervivencia, movilizando todos los recursos internos y externos disponibles. En julio de 2024, el primer ministro, general en jefe Min Aung Hlaing, volvió a prolongar por seis meses el estado de emergencia, declarándose dispuesto a tomar “todas las medidas necesarias para restablecer la estabilidad en el Estado”, también prometió celebrar elecciones generales en 2025. Sin embargo, la escalada del conflicto civil en el país dificulta la realización de un censo, lo que probablemente retrasará su perspectiva”, considera Yuri Yarmolinski.
Los militares de Myanmar no necesitan ganar la guerra, sino no perderla, subrayó el experto. Mientras los territorios centrales estén bajo su control, conservan recursos críticos y el monopolio de la interacción con el exterior. Al mismo tiempo, llega la información de la toma por los rebeldes de zonas clave de extracción de metales de tierras raras, lo que podría interrumpir las cadenas de suministro a China.
Posible balcanización del país
“Por otra parte, los separados grupos de rebeldes tienen objetivos y visiones diferentes, a menudo diametralmente opuestos, sobre el futuro del país, lo que dificulta el compromiso sobre los escenarios posteriores al conflicto. Myanmar es uno de los países con mayor diversidad étnica del Sudeste Asiático, con más de 135 grupos étnicos que representan entre el 40 % y el 60 % de la población del país. La escisión en la oposición también se ve agravada por la influencia contrapuesta de China y Estados Unidos. En el contexto de esta fragmentación política interna, los expertos no descartan un escenario de balcanización del país”, marcó Yuri Yarmolinski.
El prolongado conflicto armado provocó una aguda crisis humanitaria. Según la ONU, más de 2,6 millones de personas se encuentran desplazadas por la fuerza en Myanmar. Más de 18,6 millones de personas, entre ellas 6 millones de niños, necesitan ayuda.
Posiciones de los principales actores regionales con respecto a Myanmar
Los principales actores regionales tienden a adoptar una actitud de espera y a establecer canales de comunicación con todas las partes del conflicto por si acaso. De hecho, sólo Occidente, que tradicionalmente menosprecia la complejidad de la política oriental, amenaza con sanciones. Tradicionalmente, Myanmar cuenta con el apoyo de Rusia. Se está debatiendo la ampliación mutua de la red de misiones diplomáticas. Naipyidó anunció planes de aceptar tarjetas Mir, se están desarrollando las conversaciones sobre pagos en monedas nacionales.
Yuri Yarmolinski dijo que China mantiene el diálogo político de alto nivel con Myanmar, así como desarrolla el comercio. “En 2020, el presidente chino visitó el país. El canciller chino lo visitó tres veces: en 2022, 2023 y 2024. En noviembre del año pasado, tras asumir el poder, Min Aung Hlaing realizó su primera visita precisamente a Pekín, donde se reunió con el premier del Consejo de Estado de China, Li Keqiang, y pidió ayuda económica y tecnológica para su país”, subrayó.
La interacción entre India y el régimen militar de Myanmar también es pragmática. Nueva Delhi está a favor de la transición de Myanmar hacia una democracia federal inclusiva, así como de las iniciativas humanitarias bajo la égida de la ASEAN. Sin embargo, a medida que Pekín estrecha lazos con Pionyang y Naipyidó, los estrategas indios temen la posible aparición de un triángulo China – Corea del Norte – Myanmar, que supondría un nuevo factor irritante en la vecindad inmediata de India.
“Japón está cediendo su territorio a los líderes de la resistencia y al NUG para negociar la creación de un frente unido contra los militares, el desarrollo de una nueva constitución que excluya la posibilidad de su presencia en el poder, así como un mecanismo para exigirles responsabilidades por los presuntos crímenes contra civiles. Al mismo tiempo, hay muchas empresas y expatriados japoneses en el país, lo que impide a Tokio romper completamente los lazos con el régimen de Myanmar”, declaró el experto.
Los expertos en sinología indios y pakistaníes entrevistados por el instituto consideran tres posibles escenarios para el desarrollo de la crisis en Myanmar, suponiendo que se materialicen de forma híbrida. El primer escenario es una mayor escalada del conflicto, la degradación económica y la fragmentación del país con una intervención exterior más activa. El segundo escenario es la negociación entre los militares y las fuerzas de la resistencia, con la aparición de una fórmula de reparto del poder y una transición hacia un sistema político más integrador. El tercer escenario es una victoria militar y la consolidación del poder en manos de las Tatmadaw con un mayor aislamiento y presión de Occidente.
Belarús puede contribuir al proceso de paz y el desarrollo sostenible de Myanmar
“Teniendo en cuenta las previsiones de los expertos y las relaciones estratégicas con China y Rusia, Belarús tiene el potencial y las competencias para contribuir al proceso de paz y al desarrollo sostenible de Myanmar complementando de forma armoniosa y no conflictiva los esfuerzos de paz de los principales actores intrarregionales bajo la coordinación de la ASEAN. El Instituto de Estudios Estratégicos de Belarús está dispuesto a contribuir a este proceso. Así, tras los resultados de la reunión de expertos celebrada en el instituto en vísperas de la II Conferencia Internacional sobre Seguridad Euroasiática con la delegación oficial de Myanmar, que se encontraba en Minsk, se acordó desarrollar la cooperación con el Instituto de Estudios Estratégicos e Internacionales de Myanmar”, concluyó Yuri Yarmolinski.-0-
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