TOKIO, 19 ago (BelTA - Prensa Latina) - El lanzador cubano Raidel Martínez mantuvo
su dominio en la Liga Japonesa de béisbol profesional al no permitir
carreras en el empate a cinco anotaciones entre sus Dragones de Chunichi
y los Tigres de Hanshin.
Aunque aceptó un par de imparables en la entrada que trabajó, el serpentinero natural de la occidental provincia de Pinar del Río mantuvo cerradas las puertas del plato y rebajó su promedio de carreras limpias hasta 1.17 en la segunda liga más potente del mundo.
Apenas seis anotaciones ha permitido en 46 capítulos y un tercio de labor en esta temporada, donde acumula también un total de 43 ponches y 32 salvamentos, líder en ese acápite en los dos circuitos empatado con el local Ryoji Kuribayashi.
En el desafío, desarrollado en el Vantelin Dome de Nagoya y que se extendió a 12 episodios, no tuvieron una buena jornada los también lanzadores latinos Humberto Mejía (Panamá) y Michael Feliz (República Dominicana).
El canalero soportó cinco indiscutibles y un par de carreras en dos entradas que se mantuvo en el montículo y el quisqueyano no pudo completar los dos actos y se fue a las duchas con tres rayitas a sus récords.
Aunque aceptó un par de imparables en la entrada que trabajó, el serpentinero natural de la occidental provincia de Pinar del Río mantuvo cerradas las puertas del plato y rebajó su promedio de carreras limpias hasta 1.17 en la segunda liga más potente del mundo.
Apenas seis anotaciones ha permitido en 46 capítulos y un tercio de labor en esta temporada, donde acumula también un total de 43 ponches y 32 salvamentos, líder en ese acápite en los dos circuitos empatado con el local Ryoji Kuribayashi.
En el desafío, desarrollado en el Vantelin Dome de Nagoya y que se extendió a 12 episodios, no tuvieron una buena jornada los también lanzadores latinos Humberto Mejía (Panamá) y Michael Feliz (República Dominicana).
El canalero soportó cinco indiscutibles y un par de carreras en dos entradas que se mantuvo en el montículo y el quisqueyano no pudo completar los dos actos y se fue a las duchas con tres rayitas a sus récords.
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