Los Presidentes de Belarús y Rusia, Aleksandr Lukashenko y Vladímir Putin, después de una entrevista de trabajo con la participación de los miembros de los Gobiernos en Krásnaya Poliana se dirigieron juntos a una de las pistas de esquí de Sochi. Los estadistas eligieron una de las pistas populares. Su aparición se hizo una sorpresa para muchos aficionados a este deporte de invierno.