MINSK, 9 may (BelTA). – En cada familia belarusa la guerra resuena con el dolor, el sufrimiento y la alegría de la Victoria, declaró el presidente de la Cámara de Representantes, Ígor Sergueyenko, que participó en la solemne ceremonia de colocación de flores y coronas en el Monumento a la Victoria en Minsk, informa el corresponsal de BelTA.
“El recuerdo de la guerra está en el corazón de cada belaruso. Este recuerdo está inmortalizado en tales monumentos, obras de literatura y arte, en la memoria de cada familia, por lo que es imposible olvidar, traicionar. En cada familia belarusa la guerra resuena con el dolor, el sufrimiento y la alegría de la Victoria. Tengo tres órdenes de batalla y una medalla por el coraje de mi padre, que, por supuesto, permanecerán en mi familia durante muchos años después de mí”, dijo Ígor Sergueyenko.
“Imaginemos: hace 80 años era el mismo día luminoso, el mismo estado de ánimo, todo el mundo estaba exultante, los soldados disparaban al aire, dándose cuenta de la terminación de la sangrienta guerra. Pero sin embargo, incluso después de la guerra, la gente seguía muriendo. Y lo peor es que 80 años después el mundo no está tranquilo. Y el hecho de que intenten reescribir las páginas de la guerra, tergiversar la hazaña del soldado soviético – es simplemente una blasfemia, no se puede llamarlo de otra manera”, subrayó el jefe de la Cámara de Representantes.
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