GRODNO, 20 dic (BelTA). – Muchos refugiados tienen intención de esperar una solución positiva durante el tiempo que sea necesario. No quieren volver a casa. Tal opinión la compartió con BelTA uno de los refugiados.
Hoy es el día 43 para los refugiados en la frontera. Ahora se encuentran en el punto de alojamiento en el centro de transporte y logística Bruzguí cerca de la frontera entre Belarús y Polonia. En total, hay unas 600 personas aquí, muchas de ellas son mujeres y niños.
“Ahora aquí se queda la gente que no tiene adónde regresar. No me ha quedado ni una casa. Allí no hay trabajo, no hay forma de mantener a mi esposa e hijos. Por lo tanto, esperaremos el tiempo que sea necesario”, dice el refugiado. Está en el centro con su esposa y dos hijos. Se reconoce que hay todo: comida, ropa de abrigo.
“¡Gracias a Belarús por esto! Pero este complejo no es el mejor lugar para los niños”, señala el hombre. Él, como muchos otros refugiados, pregunta a los periodistas sobre las últimas noticias. La gente sigue esperando que el Occidente cambie su actitud hacia ellos y su situación.-0-