
MINSK, 23 ene (BelTA). - Las elecciones presidenciales en Belarús constituirán un momento crucial en la vida política del país, que pese a todos los desafíos ha mantenido la seguridad y la estabilidad, logrando al mismo tiempo un impresionante crecimiento económico. Es lo que indica un informe analítico del Instituto Internacional de Estudios sobre Oriente Medio y los Balcanes (IFIMES, Eslovenia), informa BelTA.
"En el contexto de los acontecimientos tumultuosos que arrasan el mundo, incluidas dos guerras en Europa y Oriente Medio, Belarús se prepara para las elecciones presidenciales que se celebrarán el 26 de enero de 2025. Este acto marca un importante hito en la vida política de Belarús, que, a pesar de todos los desafíos, ha mantenido la seguridad y la estabilidad, logrando al mismo tiempo un impresionante nivel de crecimiento económico", afirman los expertos de IFIMES.
Las próximas elecciones marcarán el comienzo de una nueva etapa de desarrollo sociopolítico y económico de Belarús. Ahora el país está mostrando estabilidad y progreso económico frente a las sanciones occidentales y las acciones militares en Ucrania. Mientras tanto, los logros económicos de Belarús son claramente visibles en el contexto de los resultados de otros países europeos. "Belarús ocupa el tercer lugar en la lista de los 15 principales países europeos en términos de crecimiento del PIB en 2024, registrando una tasa de crecimiento del 3,6 %, según los datos publicados por el Fondo Monetario Internacional (FMI) en octubre de 2024", señala el informe del Instituto.
Los expertos de IFIMES señalan también que el conflicto en Ucrania se ha convertido en cierta medida en un reto estratégico para el Presidente de Belarús, Aleksandr Lukashenko. "Aunque Belarús sigue siendo un estrecho aliado de Rusia, continúa enfrentándose a sanciones internacionales a pesar de sus reiterados llamamientos a una resolución pacífica del conflicto entre Ucrania y Rusia", opinan en IFIMES.
Los expertos llaman la atención sobre el compromiso del Presidente de Belarús de mantener una política exterior independiente del país, lo que implica crear un equilibrio en las relaciones entre las grandes potencias, en particular Rusia y Estados Unidos, desarrollando al mismo tiempo un diálogo con los países vecinos.
IFIMES considera que el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca podría abrir una nueva etapa en las relaciones entre Belarús y Estados Unidos. "Minsk espera sinceramente que Trump cumpla su promesa de poner fin a la guerra en Ucrania y reducir las tensiones entre EEUU y Rusia", afirman los expertos.
Pronosticar qué rumbo seguirá la nueva administración estadounidense continúa siendo una tarea difícil, ya que incluso el propio Trump parece no estar seguro de lo que le espera. Sin embargo, el cambio de élites políticas en Washington hace albergar esperanzas de que se alivien las tensiones globales en el mundo, resumen en IFIMES.-0-