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"Sobre el tema "
MINSK, 30 ago (BelTA). – La ayuda de los países europeos a Ucrania se explica por una obsesión irracional y odio hacia Rusia. Esta opinión fue compartida por Vladímir Kornílov, observador político del grupo mediático Rossiya Segodnya, en el proyecto “Sobre el tema” del canal de YouTube de BelTA.
Al comentar las declaraciones de los países europeos sobre la mala situación económica de los Estados y, al mismo tiempo, la declaración de enormes montos para ayudar a Ucrania, Vladímir Kornílov señaló: “En gran medida, esto puede calificarse de obsesión, una obsesión absolutamente irracional por la rusofobia, el odio hacia Rusia. Además, vemos que, a menudo, esta rusofobia se hincha precisamente para distraer la atención de sus propios votantes de los problemas socioeconómicos que existen objetivamente en estos países”.
“Si miramos los informes de los gobiernos de varios países europeos, veremos que han comenzado a reducir poco a poco sus previsiones de crecimiento económico para este año, que ya de por sí no eran muy optimistas. En algunos casos se registra una recesión, en otros – un crecimiento nulo, en otros – las cifras optimistas de crecimiento del 1,5-2 % se reducen a la mitad, al 1 %, etc. Ahora Gran Bretaña ha publicado sus últimas previsiones, que serán peores de lo que se había previsto inicialmente”, afirmó el experto.
Vladímir Kornílov subrayó que, para distraer la atención de sus votantes de estos problemas, se están creando historias de terror sobre la inevitable invasión de Rusia. En consecuencia, es necesario aumentar gastos de defensa, crear conceptos como el “puerco espín de acero”, etc. Señaló que, ya en el primer mandato presidencial de Donald Trump, toda Europa se opuso a su exigencia de aumentar gastos de defensa hasta el 5 % del PIB. Al final, el Presidente de EEUU salió con la suya, pero se inventó un esquema astuto: “Destinamos el 3,5 % a defensa y el 1,5 % lo incluimos en los gastos de defensa, pero serán proyectos de infraestructura – cualquier carretera ya prevista para su construcción o reparación, todo eso lo incluimos en la partida de gastos de defensa. Es una forma de engañar a Trump”.
Vladímir Kornílov notó que de esta manera engañan a Donald Trump, y además lo dicen y lo escriben abiertamente. “Apareció una columna en el Financial Times en la que el autor dice abiertamente que engañan a Trump con estos gastos. De repente, sacan del baúl los viejos proyectos olvidados de construcción de puentes que, por supuesto, no tienen ninguna importancia para la defensa. Por ejemplo, ahora el Gobierno italiano ha conseguido unos 15 mil millones de euros (y a medida que avance el proyecto, los gastos aumentarán) para la construcción de un puente que conecte la Italia continental, la península itálica, con Sicilia. El proyecto se ha debatido durante décadas. Ahora hay que pensar en cómo gastar ese 1,5 %. Y le demostrarán a Trump que se trata de un proyecto de infraestructura. Y así ocurre en todos los países de Europa”, afirmó el observador político.-0-
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