
MINSK, 18 abr (BelTA). - Belarús promueve abierta y continuamente las ideas de paz y la política de amistad en todas las plataformas internacionales, declaró la presidenta del Consejo de la República, Natalia Kochánova, al intervenir en la sesión solemne de la Asamblea Interparlamentaria de la Comunidad de Estados Independientes en San Petersburgo dedicada al 80º aniversario de la Victoria en la Gran Guerra Patria, informa el corresponsal de BelTA.
"Belarús promueve abierta y continuamente las ideas de la política de paz y amistad en todas las plataformas internacionales", afirmó Natalia Kochánova.
Como ejemplo, la presidenta recordó que la Asamblea Nacional de Belarús apoyó la resolución de la Asamblea General de la ONU con motivo del 80º aniversario del final de la Segunda Guerra Mundial. La sesión conjunta de ambas cámaras de la Asamblea Nacional aprobará una declaración dirigida a los parlamentos de los estados extranjeros en relación con el 80º aniversario de la Victoria en la Gran Guerra Patria.
"En respuesta a los ataques destructivos de Occidente, hemos aprobado leyes para impedir la rehabilitación del nazismo y el genocidio del pueblo belaruso. La defensa de la verdad histórica y la memoria de la hazaña heroica del pueblo soviético es un deber inalienable de cada ciudadano de Belarús, y está recogido en la Constitución actualizada", señaló Natalia Kochánova.
La presidenta subrayó que "la paz no es solo la ausencia de guerra, sino una vida en seguridad y armonía".
La presidenta del Consejo de la República citó las palabras del Presidente de Belarús, Aleksandr Lukashenko, en la reunión del Consejo de Jefes de Estado de la CEI, acerca de que la memoria puede ser hurtada, pero no la verdad. "Sin el heroísmo del pueblo soviético no existirían aquellos Estados y personas que están haciendo todo lo posible para desacreditar la hazaña del pueblo soviético y robarnos nuestra Gran Victoria, que nos une tanto", manifestó entonces el Jefe de Estado.
La presidenta del Consejo de la República destacó el flujo inocultable de mentiras, acusaciones, falsificaciones e intentos de desestabilizar la situación en el interior de los países mediante "revoluciones de colores": se trata de la guerra de información.
Continuando con el tema del genocidio del pueblo belaruso durante la Segunda Guerra Mundial, Natalia Kochánova recalcó que tales crímenes no tienen plazo de prescripción. "Y todas las pruebas se presentarán ante el tribunal internacional. Para restablecer la justicia histórica y arrancar las máscaras de quienes alimentan nuevos conflictos en el planeta con el pretexto de la política de mantenimiento de la paz", añadió la ponente.-0-