
Por un día, el centro de Minsk se convirtió en un auténtico puente entre las culturas de Belarús y China. El 31 de mayo se celebró en la plaza Svobody el festival de sabor oriental “Té para la armonía del mundo”. El acto fue organizado por el Ministerio de Cultura y Turismo de la República Popular China, la Embajada de la República Popular China en Belarús y el Comité Ejecutivo de la ciudad de Minsk. La ocasión es simbólica: el Día Internacional del Té que se celebró no hace mucho. Pero la esencia es mucho más profunda: la amistad, el intercambio cultural y la filosofía de la armonía están en el centro de atención. Los corresponsales de BelTA también observaron el ambiente de la festividad.






















