BREST, 6 sep (BelTA). - El Presidente belaruso, Aleksandr Lukashenko, considera que la provincia de Brest es un ejemplo de desarrollo estable, lo mencionó en la fiesta con motivo del milenio de la ciudad de Brest, informa el corresponsal de BelTA.
“Hoy en día la provincia de Brest es un ejemplo de desarrollo estable: de la agricultura eficaz a las tecnologías altas. Con frecuencia cito como ejemplo nuestras regiones occidentales. Con gran placer las visito aunque no muy a menudo como querría”, resaltó Aleksandr Lukashenko.
El Presidente notó que con la provincia de Brest tiene vinculados los recuerdos especiales: el servicio en las tropas fronterizas. “El servicio era una buena escuela de la vida, enseñó a amar y proteger a vosotros, la población, y defender nuestra Patria. Hasta hoy pensé que he llegado a casa. Aquí pasó la parte más difícil de mi vida, pero muy importante porque es dudoso que sin este período, sin mi servicio en la frontera estuviera aquí como Presidente”, acentuó el estadista.
El Jefe de Estado constató que Brest abre una puerta en Belarús, un país hermoso, fuerte, pacífico que siempre acoge cordialmente a los huéspedes. “Precisamente nosotros – la generación actual de los belarusos – tenemos suerte de festejar este gran aniversario. Nos preparábamos por el país entero. La ciudad es renovada para el milenio. Hoy damos paso al segundo milenio. Me dirijo a todos que han nacido aquí, a todos para quien la ciudad de Brest es la segunda patria. Sois singulares, poseéis nuestros méritos nacionales: sois talentosos, cordiales, acogedores, laboriosos, emprendedores y patrióticos”, acentuó el máximo mandatario.
El Presidente notó que a lo largo del milenio pasado en la crónica de Brest fueron inscritas muchas páginas históricas. “Vosotros vais a crear la historia del futuro. Este año del aniversario habéis mostrado vuestro verdadero amor hacia la ciudad natal con hechos. Se refleja en el confort, belleza creada en los últimos tres años, en la aspiración sincera de hacer su aportación al desarrollo de calles, parques, patio”, se dirigió el Presidente a los habitantes de Brest.
Asimismo deseó guardar la única atmósfera de Brest, la intención de progresar, la capacidad de trabajar en bien de su pueblo y toda la Belarús, también transferir esos valores a sus niños, enseñarles a amar a su patria chica de modo igual y guardar las mejores tradiciones para muchos siglos futuros. “Que el ángel de la guardia (un monumento para el milenio de Brest) regalado a la ciudad guarde lo pasado, lo presente, lo futuro, guarde a cada uno de vosotros”, agregó Aleksandr Lukashenko.
El Jefe de Estado regaló a la ciudad un ejemplar de la Biblia de Brest publicada aquí hace unos 500 años. “El Año de la Patria Chica este libro vivo regresa a casa. Nuestros antepasados consideraban que la ciudad donde se publicaba la Biblia era defendida por el cielo”, subrayó.-0-
