MINSK, 6 may (BelTA). - Gracias a la desarrollada vertical del poder y la disciplina de ejecución, el sistema de la administración estatal funciona con precisión y en armonía hasta en las situaciones difíciles, declaró el Presidente de Belarús, Aleksandr Lukashenko, en la reunión sobre el perfeccionamiento de la legislación sobre el servicio público, reporta BelTA.
Aleksandr Lukashenko marcó que el servicio público es un instituto público más importante y de su eficacia depende en directo el desarrollo exitoso del país, el aumento de la calidad y del nivel de vida de los ciudadanos.
“En más de un cuarto de siglo desde el momento de recibir la independencia logramos desarrollar buena vertical del poder al formar un aparato estatal compacto, garantizamos la necesaria disciplina de ejecución. Como resultado, hasta en situaciones más difíciles el sistema de la administración pública funciona con precisión y en armonía. Lo confirma la consolidación de funcionarios públicos y su trabajo en condiciones del año pasado. En realidad era un papel de tornasol”, señaló el Presidente.
Según sus palabras, en la etapa actual no se trata del cambio brusco del sistema viejo o la reforma del servicio público, la tarea esencial es impulsar su desarrollo ulterior. “Considero que lo más importante a este respecto son cuadros. Necesitamos atraer al aparato estatal no solo a los especialistas cualificados y con sentido de finalidad que sean capaces de resolver de modo operativo las tareas relevantes. Necesitamos unas personas del Estado. Si hay cuadros, el sistema funcionará. Llegando al servicio público la persona debe entender que su obligación principal es servir al país y al pueblo belaruso”, acentuó Aleksandr Lukashenko.
Por eso de importancia especial es la imagen moral y ética del funcionario público, su conducta tanto en el trabajo como fuera, notó el Jefe de Estado. Sugirió que la nueva ley introduzca insignias para los funcionarios similares a las de un diputado. “Tenemos que estipular claramente en la ley que todo funcionario debe destacar en la sociedad, en la vida cotidiana. Digamos que una insignia de la bandera del Estado. Si eres funcionario, debes distinguirte en la sociedad para que la gente pueda acercarse a ti en busca de ayuda, consejo, apoyo o simplemente para hablar contigo. Habrá menos gente corriendo a las oficinas de recepción y menos gente escribiendo cartas. Y en segundo lugar, esto es una prueba para cualquier funcionario público: debe estar orgulloso de ser un funcionario público. De lo contrario, no debería ser funcionario”, resaltó.
Al mismo tiempo marcó que la garantía del alto estatus y el prestigio de la profesión es imposible sin la fijación de garantías sociales y jurídicas. Sin embargo, las garantías dichas deben relacionarse estrictamente con las obligaciones y la responsabilidad de cada funcionario, añadió el Presidente. “Y aquí no debe existir ninguna exageración. El funcionario debe ser modesto, honrado, incluso respecto a lo material. El funcionario público no significa el salario diez veces más. Pero todo debe ser de modo digno. Para que no existiera un contraste como en los tiempos soviéticos con Gorbachiov: a los secretarios de comités regionales, provinciales y otros les subieron el salario dos veces y provocaron la agresión del pueblo que vivía no simplemente. Aquí la orientación debe ser al pueblo”, resaltó el líder belaruso.
Por otro lado, acentuó el Jefe de Estado, los funcionarios públicos tampoco deben ser pobres. “Entonces posiblemente habrá menos corrupción. Aunque no soy partidario del hecho que si ofreces más salario, desaparece la corrupción. Siempre falta el dinero. Pero va a pensar entonces: “Si tomo soborno, no solo echarán, encarcelarán. Aquí tengo buen salario y servicio”. Por eso es menester determinar con precisión tales cuestiones”, añadió.
Aleksandr Lukashenko declaró que el estatus del funcionario público sube altamente, pero las exigencias serán correspondientes. De eso el Presidente habló en la Asamblea Popular de toda Belarús. En calidad de un ejemplo negativo de la disciplina de ejecución el Presidente citó el trabajo orientado al nuevo registro de las organizaciones comerciales. “Pasó más de un mes. No veo reacción de parte de la Administración del Presidente y los presentes. ¿Esperan una nueva ola? Nuestros politólogos, nuestros partidarios (diputados y otros) nos dicen: “Hay que limpiar la sociedad, vemos que pasaba”. ¿Qué estamos esperando? Saben que mediante estas estructuras se realiza la financiación de estos bandidos en el país”, enfatizó el estadista.
El proyecto de la nueva ley “Sobre el servicio público” persigue el fin de resolver las tareas mencionadas. El trabajo sobre el proyecto se realizaba a lo largo de unos años. En diciembre pasado los diputados aprobaron el borrador de la ley a primera instancia. “Hasta su examen a segunda instancia acordamos deliberar una vez más las posiciones clave del documento indicado junto con los proyectos de decretos preparados para su desarrollo. Tenemos que estar seguros de la corrección de los vectores marcados del desarrollo del servicio público”, resaltó el Presidente.
Él se interesó en cuánto la nueva ley responderá a las exigencias actuales y perspectivas del Estado y la sociedad, qué criterios se prevén para alcanzar el equilibrio de la disciplina, la responsabilidad de funcionarios públicos y el aumento del prestigio del servicio público. “Una vez más mis exigencias: los derechos y las obligaciones de funcionarios públicos, las reglas de su conducta deben parecer a los militares, o hasta más. Claro que no se puede arrear demasiado”, notó el líder belaruso.
Como informó en la reunión el jefe de la Administración del Presidente, Ígor Sergueyenko, la ley vigente sobre el servicio público fue aprobada en 2003. “Tomando en cuenta el cambio del mundo, los desafíos delante del Estado puestos por el tiempo, vemos que la cuestión del perfeccionamiento del servicio público es muy actual. Los acontecimientos del año pasado mostraron que el desarrollado sistema de la administración pública es eficaz y fuerte. Pero también son fuertes las amenazas y los riesgos que crecen en los últimos años, que exigen la toma de medidas correspondientes para defender nuestra estatalidad y soberanía”, añadió.
Ígor Sergueyenko recordó que hace tres años por encargo del Jefe de Estado se creó un grupo de trabajo y luego en el Consejo de la República, la Administración del Presidente y la Academia de Dirección se organizaban las discusiones de la nueva redacción de la ley sobre el servicio público y proyectos de decretos preparados para su desarrollo. “Las novedades legislativas están encaminadas a subir la eficiencia de la actividad de organismos estatales, el prestigio del servicio público y la calidad de elección de funcionarios públicos”, acentuó el jefe de la Administración del Presidente. Según sus palabras, una de las exigencias de principio hacia el sistema se queda que deben ser profesionales fieles a su país.
El proyecto de la nueva ley sobre el servicio público se preparó por encargo del Presidente hecho en julio de 2018. El borrador de la ley fue preparado por el grupo de trabajo interdepartamental formado tanto por los representantes de los órganos públicos como los científicos y expertos que no son funcionarios públicos.
El proyecto de la ley consagra un amplio sistema de administración pública, que incluye el servicio civil, el servicio militar y el servicio en organizaciones paramilitares. Según los redactores, esto ayudará a eliminar las contradicciones en la regulación legal y a sentar las bases para la convergencia y el desarrollo de enfoques unificados en la regulación de los diferentes tipos del servicio público.
El documento proporciona normas comunes para todos los funcionarios, definiendo los principios y conceptos de la función pública. Se está introduciendo un registro de puestos de trabajo de la administración pública y se está mejorando el sistema existente de grados de los funcionarios. El registro permitirá diferenciar los puestos de trabajo civiles y sus correspondientes retribuciones laborales en función del nivel del organismo estatal, las competencias del funcionario, el nivel de cualificación y la antigüedad en la función pública. Para ello fue preparado un proyecto de decreto sobre los puestos de la administración pública.
También se prevé reforzar la disciplina y la responsabilidad de los funcionarios para acercar su estatuto jurídico al de los militares. En particular, se está estableciendo un concepto de disciplina de servicio de los funcionarios y formas de garantizarla por analogía con los requisitos de los reglamentos militares y los estatutos de las organizaciones paramilitares; se están estableciendo requisitos generales para el comportamiento ético de los funcionarios por analogía con las disposiciones de los estatutos disciplinarios existentes que se aplican tanto al comportamiento oficial como a la conducta fuera del trabajo.
Para ello, se formularon requisitos éticos generales para los funcionarios en forma de anexo a la ley. El incumplimiento de las exigencias de la ética oficial conllevará medidas disciplinarias contra el funcionario.-0-
