Foto de la cancillería
MINSK, 26 sep (BelTA). – La falta de diálogo y la amenaza del uso de la fuerza siguen destruyendo el orden internacional. Lo afirmó el ministro de Asuntos Exteriores de Belarús, Maksim Ryzhenkov, el 26 de septiembre en Nueva York, durante la reunión ministerial del Grupo de Amigos en Defensa de la Carta de las Naciones Unidas, informa el corresponsal de BelTA.
Maksim Ryzhenkov recordó que la Organización de las Naciones Unidas, que nació con la adopción de su Carta, celebra este año su 80º aniversario. Y este aniversario nos da motivos para hacer balance del trabajo de la ONU durante ocho décadas.
“¿Se ha vuelto el mundo más seguro y predecible, como se esperaba? ¡Todos sabemos que no! La profunda desconfianza, la falta de diálogo, el miedo y la amenaza del uso de la fuerza siguen destruyendo el orden internacional. La propia organización se ve amenazada. Pero no se puede culpar de ello a la ONU. Solo los Estados miembros pueden y deben hacer que la ONU sea más fuerte y eficaz”, declaró el ministro.
Según él, hay muchos ejemplos en los que los Estados miembros de la ONU no lograron los resultados esperados debido a la falta de coherencia de las decisiones adoptadas en el pasado. Por ejemplo, pocos años después de la Segunda Guerra Mundial, la organización tomó a tiempo decisiones fundamentadas sobre la creación de los Estados árabe y judío en el territorio de Palestina y su coexistencia pacífica.
“Lamentablemente, en aquel momento estas valiosas decisiones no se aplicaron con éxito. ¿Cuál es el resultado? Llevamos casi 80 años debatiendo la cuestión palestina. Pero el problema no hace más que agravarse”, afirmó el diplomático.
Otra “señal de alarma” del pasado, según el canciller belaruso, es el incumplimiento de los principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas y se refiere a Venezuela. El país se enfrenta a una amenaza real de uso de la fuerza.
“Hoy debemos declarar al mundo entero que volvemos a expresar nuestra firme solidaridad con Venezuela y confirmamos nuestra voluntad de luchar por la erradicación del uso de métodos contrarios al derecho internacional y a la Carta de las Naciones Unidas”, subrayó el jefe del Ministerio de Asuntos Exteriores.
“La aplicación de medidas coercitivas unilaterales contra más de 40 países es otro ejemplo de nuestro fracaso debido a la falta de solidaridad colectiva y de capacidad para actuar de forma unida contra el enfoque arbitrario de Occidente hacia la mayoría global. Es el resultado de un mundo unipolar en el que Occidente, tras considerar que había ganado la Guerra Fría, comenzó a ignorar la Carta de la ONU y las normas de la Organización Mundial del Comercio”, añadió el ministro.
Maksim Ryzhenkov señaló que el Grupo de Amigos en Defensa de la Carta de la ONU está intensificando sistemáticamente la presión sobre la práctica ilegal de algunos países de aplicar medidas coercitivas unilaterales contra Estados soberanos. Estas acciones persistentes llevaron a la proclamación del 4 de diciembre como Día Internacional contra las Medidas Coercitivas Unilaterales, que se convirtió en parte de los esfuerzos globales para crear conciencia sobre sus consecuencias negativas, su incompatibilidad con el derecho internacional y la Carta de las Naciones Unidas.
“Debemos seguir prestando la debida atención a este problema para acabar con la ilusión promovida por los países occidentales sobre las llamadas sanciones inteligentes, que supuestamente no perjudican a la gente común”, instó el diplomático belaruso.-0-
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