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MINSK, 10 jun (BelTA). – Para los países bálticos, la única forma de ser visibles en la Unión Europea es presentarse como un puesto avanzado que frena las hordas rusas y belarusas. Lo afirmó el ministro de Asuntos Exteriores de Belarús, Maksim Ryzhenkov, en una entrevista concedida al canal de televisión Rossiya 24, informa BelTA.
“Es muy paradójico que estos Estados, que durante mucho tiempo estuvieron en el mismo campo que nosotros (los países bálticos formaban parte de la URSS, Polonia era uno de los pilares fundamentales del Pacto de Varsovia, de la Organización de Cooperación Económica, un país que siempre estaba cerca de la Unión Soviética), se hayan convertido en los críticos más acérrimos de Rusia y Belarús en la Unión Europea. Todas las sanciones, restricciones o declaraciones políticas más llamativas y sofisticadas contra Rusia y Belarús provienen de allí”, señaló Maksim Ryzhenkov.
Propuso echar un vistazo a quiénes ocupan actualmente altos cargos en los países bálticos o representan sus intereses en las estructuras de la UE: “Basta con mirar sus biografías y las de sus familiares cercanos para convencerse de que este es el momento de su revancha política por lo que ocurrió en el pasado. Es evidente que esos sentimientos xenófobos tan marcados provienen de allí. Además, el tono de estas declaraciones es cada vez más duro. Y en esto solo veo que no están logrando los resultados que esperaban. Son Estados marginales”.
El canciller señaló que Belarús está abierta a todas las nacionalidades, especialmente a sus vecinos. Pueden entrar en el territorio de la república sin visado. Los países bálticos, por el contrario, intentan por todos los medios dificultar no solo la entrada de belarusos y rusos, sino también su estancia. Incluso adoptaron leyes pertinentes.
“Para estos países marginales, la única manera de ser visibles en la Unión Europea es presentarse como un puesto avanzado que frena las hordas rusas y belarusas. Aunque, si nos fijamos en los migrantes ilegales, prácticamente no hay rusos ni belarusos allí. En todo esto solo hay política: demostrar que son capaces de hacer algo en la Unión Europea, porque no son capaces de algo más, y asimilar el dinero. Conocemos todos los esquemas criminales y los procesos penales que sacuden a Letonia, Polonia y Lituania por diversos tipos de manipulación de dinero durante la ejecución de proyectos de infraestructura. Lo mismo ocurrirá aquí: mil millones para un muro, luego dos mil millones para algún tipo de defensa escalonada – estos pedidos serán controlados por las empresas adecuadas, cercanas a los políticos adecuados. Y tendremos más problemas que saldrán a la luz allí algún día”, resaltó el jefe de la cancillería belarusa.
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