MINSK, 23 ago (BelTA). – La invitación a las elecciones de los observadores extranjeros representantes de diversos sistemas internacionales certifica que la parte belarusa es abierta. Lo declaró hoy a los periodistas el ministro de Asuntos Exteriores de Belarús, Vladímir Makéi, informa el corresponsal de BelTA.
“Hemos enviado invitaciones a todos los socios que se dedican a la observación de las elecciones. El Parlamento a su vez ha dirigido invitaciones a los sistemas parlamentarios”, precisó el diplomático.
En los próximos días en Belarús desarrollará su actividad un grupo de evaluación de la Oficina para las Instituciones Democráticas y los Derechos Humanos de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OIDDH de la OSCE) que estudiará la situación previa a las elecciones, precisará el número de distritos, el posible número de los observadores (de largo y corto plazos) necesario para la observación de las elecciones. “Más allá se tomará la decisión correspondiente. Es una práctica tradicional. Manifestando la disposición para la interacción internacional, a partir de los primeros días (inmediatamente después de que se había anunciado la fecha de las elecciones) enviamos las invitaciones a todos los sistemas internacionales que se dedican a la observación de las elecciones, hecho que certifica lo abierta que es la parte belarusa”, agregó Vladímir Makéi.
“Puede que la OIDDH envíe a un grupo (quizás de unas 20 personas) de antemano, dentro de un mes. Unos días antes de las elecciones llegará el grupo fundamental de observadores a corto plazo (unas 300-400 personas). Jamás hemos restringido este número ni pensamos hacerlo”, aseguró el ministro.
Precisó que además de la OIDDH de la OSCE, esta vez las invitaciones se habían enviado a la OCS y la CEI, también en el contexto de la interacción interparlamentaria. Asimismo siempre hay muchos ciudadanos extranjeros que desean intervenir como observadores individuales. “Lo estudiaremos según el régimen establecido. Disponemos de leyes correspondientes”, informó Vladímir Makéi.
Al mismo tiempo la parte belarusa actuará siguiendo la legislación nacional. “Algunos de los que desean intervenir no tienen nada que ver con la observación de las elecciones y lo aprovechan con fines políticos. Se trata de unos sistemas independientes… Actuaremos según las leyes belarusas vigentes apoyándonos en sus disposiciones, en cooperación con la Comisión Electoral Central y nuestro Parlamento”, precisó el jefe de la Cancillería belarusa.
Hablando del número total programado de observadores internacionales que pueden llegar a las futuras elecciones parlamentarias, el ministro señaló que esto depende de una serie de factores: “Las compañas electorales que se desarrollan en otros estados, las posibilidades y potenciales de la OIDDH o de la sede de la CEI en lo que toca a la delegación de observadores”.-0-
