
MINSK, 23 mar (BelTA). – Belarús vive y se desarrolla a pesar de la presión y la histeria por parte de varios países occidentales, así como los informes falsos sobre el país. Lo declaró la representante permanente de Belarús ante la Oficina de la ONU y otras organizaciones internacionales en Ginebra, Larisa Bélskaya, en su discurso en respuesta al informe sobre “violaciones de los derechos humanos” en el contexto de las elecciones presidenciales en Belarús en 2020 presentado en la 52ª sesión del Consejo de Derechos Humanos, informa BelTA.
“Me gustaría comenzar mi discurso con una invitación anunciada más de una vez en esta sala: visiten Belarús. Hoy en día, los habitantes de 2/3 de los estados pueden venir a nuestro país sin visado. Ustedes verán las ciudades y pueblos tranquilos y bien cuidados de Belarús, la vida pacífica y constructiva de sus ciudadanos. Hablarán con los obreros de las fábricas, campesinos, médicos, profesores, estudiantes, artistas y deportistas. Simplemente con la gente en las calles. Será información veraz”, señaló Larisa Bélskaya.
Subrayó que el compromiso del Estado belaruso con la promoción y protección de los derechos humanos, con la construcción de una sociedad pacífica, justa y libre de barreras sociales fue confirmado en el marco del Examen Periódico Universal, así como en numerosos informes especializados y calificaciones de la ONU.
“Belarús vive y se desarrolla a pesar de la presión y la histeria por parte de una serie de países occidentales y el supuesto peritaje de la OACDH, que lleva varios años haciendo informes falsos sobre mi país, uno de los cuales se presenta hoy. Tanto los autores de dichos informes como los iniciadores de resoluciones antibelarusas en el Consejo de Derechos Humanos humillan al pueblo belaruso al tratar de identificar a toda nuestra nación con unas ONG marginales y unas centenas de supuestos miembros de la oposición, que huyeron cobardemente del país tras un intento fallido de revolución de colores en 2020. Estas personas que intentaron tomar ilegalmente el poder en Belarús son “hombres de negocios de la democracia y los derechos humanos”. Hoy, como en 2020, sus acciones para desacreditar y socavar el Estado belaruso están pagadas y dirigidas por los patrocinadores occidentales”, notó la diplomático.
Larisa Bélskaya resaltó que el intento de golpe de Estado en Belarús fracasó en 2020. Pero la guerra mediática contra el país se está acelerando. “Las razones de los ataques contra Belarús son principalmente geopolíticas. No queremos ser arrastrados a la órbita de la influencia occidental y efectuamos nuestra propia política exterior. Defendemos firmemente nuestro propio modo de desarrollo y protegemos nuestra soberanía estatal. Mantenemos la estabilidad a pesar de las asfixiantes sanciones impuestas por varios países occidentales y de sus intentos regulares de desestabilizar la situación y arrastrar a Belarús a un conflicto armado. El pueblo que experimentó el genocidio de la Segunda Guerra Mundial no se rendirá ante la intimidación y las amenazas”.
Al mismo tiempo, la representante permanente de Belarús agradeció a los aliados y socios su valioso apoyo y fructífera cooperación para la prosperidad de nuestras naciones.-0-