Las relaciones entre Belarús y China son desde hace tiempo un ejemplo de cooperación interestatal. Y mientras el Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, se queja de las negociaciones extremadamente difíciles y la terquedad del presidente de la República Popular China, Xi Jinping, Aleksandr Lukashenko construye relaciones verdaderamente amistosas y cordiales con el líder chino. En este episodio del proyecto de YouTube de BelTA “De hecho: Decisiones del Presidente” hablaremos de la principal iniciativa de los dos líderes: el Parque Industrial Chino-Belaruso Gran Piedra. Ustedes conocerán por qué Belarús y China están construyendo una ciudad innovadora del futuro cerca de Minsk y si este proyecto multimillonario ha dado sus frutos, quién se convierte en residente del parque industrial y en qué condiciones, y por qué Xi Jinping llama a Gran Piedra la perla de la Ruta de la Seda.
Sobre Gran Piedra
La idea de crear el Parque Industrial Chino-Belaruso surgió en 2010. El posible proyecto conjunto se anunció tras las negociaciones entre Aleksandr Lukashenko y Xi Jinping en Minsk. En aquel momento, Xi Jinping visitaba Belarús como vicepresidente de China. Un año y medio después, los países firmaron un acuerdo intergubernamental y, en enero de 2012, tras los procedimientos de ratificación, este documento entró en vigor.
Se decidió construir Gran Piedra a 25 kilómetros de Minsk, muy cerca del aeropuerto internacional, las vías férreas y la autopista transnacional Berlín-Moscú. Para garantizar unas condiciones cómodas para hacer negocios y el atractivo de inversión, se creó un régimen jurídico especial en el parque industrial.
“Es algo inimaginable. Pensaba que era muy difícil que lo consiguiéramos. Se trata de una inversión de decenas de miles de millones de dólares. Y China no ha hecho nada parecido en ningún otro país. Se crearán las fábricas más modernas. Tenemos muy buenas perspectivas. Pero, por supuesto, damos un trueno. La llegada de China aquí, al centro de Europa, creo que asustó a muchos. ¿Por qué asustarse? No cooperamos con China en contra de nadie. Cooperamos por el bien de nuestro pueblo. No asustamos a nadie ni vamos a asustar a nadie. Pero, al mismo tiempo, la llegada de China y las enormes inversiones son un factor de seguridad para nuestro Estado”, declaró Aleksandr Lukashenko en una rueda de prensa en diciembre de 2011.
En el verano de 2014 se celebró en el parque industrial la ceremonia solemne de colocación de la primera piedra. En el evento participaron más de cincuenta altos directivos de las principales empresas mundiales de diferentes países. Se suponía que en Gran Piedra se desarrollarían las áreas más avanzadas de la ciencia y la industria. Aquí se generarán nuevos conocimientos y miles de ciudadanos adquirirán excelentes habilidades profesionales, declaró entonces el primer ministro de Belarús, Mijaíl Miasnikóvich.
Un año después, los líderes de Belarús y China visitaron la obra. Fue entonces cuando Xi Jinping calificó el parque industrial como la perla de la Ruta de la Seda. Esa fecha se convirtió en el día oficial del nacimiento de Gran Piedra.
Los expertos de Forbes calificaron el parque industrial como la esmeralda del crecimiento económico de Belarús. ¡Y con razón! El coste total del proyecto, cuya magnitud es tal que su ejecución está prevista para varias décadas, se estimó en miles de millones de dólares.
¿Cuántos residentes hay en Gran Piedra?
Hoy en día, hay más de 150 empresas residentes en Gran Piedra. Se incorporaron a la actividad económica 850 hectáreas de terreno, cuando hace solo 10 años aquí solo había bosques y pantanos. Y si la Compañía de Desarrollo del Parque Industrial comenzó con millones de dólares en activos, en los últimos años se aumentaron 400 veces. Y eso teniendo en cuenta que se ha asimilado solo alrededor del 8 % del territorio de Gran Piedra.
“Este año comenzamos la segunda fase. Se trata de unas 400 hectáreas de terreno. Comenzamos la construcción de una gran terminal ferroviaria de contenedores. Será un proyecto simbólico, un verdadero punto en la Ruta de la Seda y en el territorio del parque. Seguiremos construyendo viviendas y, por supuesto, desarrollando la producción, principalmente el clúster farmacéutico, el biotecnológico y el de construcción de maquinaria. Estas son nuestras prioridades, nuestros objetivos principales”, explicó Kirill Korotéyev, primer director general adjunto de la Compañía de Desarrollo del Parque Industrial.
Desde el primer día de la implementación del proyecto, se invirtieron en Gran Piedra alrededor de mil millones de dólares. Con todo eso, se destinó a este proyecto menos del 5 % del presupuesto estatal. De hecho, por cada rublo invertido por Belarús, se recibieron 21 rublos de inversiones, principalmente extranjeras. Por lo tanto, estas inversiones ya se justificaron.
El régimen jurídico especial del parque industrial estará vigente hasta 2062. Se espera que para entonces Gran Piedra se convierta en una auténtica ciudad satélite, con una población de unos 100 000 habitantes. Hay muchos ejemplos de este tipo en China: sus grandes ciudades surgieron de pequeños pueblos pesqueros gracias a las ventajas y preferencias concedidas a las empresas manufactureras.
“El parque es eficaz. Además, tiene futuro, perspectivas y posibilidades de desarrollo. Contamos con representación de 15 países y estamos ampliando la presencia. Por ejemplo, este año se unieron las empresas con capital turco y suizo. El objetivo del parque no es solo crear empresas chino-belarusas, sino que sea una ciudad internacional, un proyecto internacional”, declaró Kirill Korotéyev.
¿A qué se dedican los residentes del parque industrial?
La lógica principal para atraer residentes no ha cambiado en diez años: no se hace hincapié en la cantidad, sino en el alto nivel tecnológico. Así, hoy en día, entre los participantes del proyecto se encuentran empresas dedicadas al desarrollo y la fabricación de productos en los ámbitos de la electrónica, las telecomunicaciones, los nuevos materiales, la producción de equipos láser y drones, el procesamiento de grandes volúmenes de datos, la farmacia y la biotecnología, y la construcción de maquinaria. Al mismo tiempo, ya en el proyecto ya existen clústeres tecnológicos completos. Los más grandes en la actualidad son los clústeres en el ámbito de la construcción de maquinaria y la medicina.
El director general del Centro de Innovación Tecnológica Industrial Chino-Belaruso señaló que el Parque Industrial Gran Piedra es un proyecto conjunto clave de China y Belarús en el marco de la Iniciativa de la Franja y la Ruta. Fue creado con el apoyo personal de los Jefes de Estado y se convirtió en la mayor plataforma industrial extranjera de China y en un ejemplo de alto nivel de cooperación bilateral.
“En más de 10 años, el parque industrial se convirtió en una zona de desarrollo activo de alta tecnología. La elección de Gran Piedra como sede del Centro Chino-Belaruso se debe al deseo de integrarse en el ecosistema industrial formado aquí, establecer una interacción eficaz con empresas de alta tecnología e innovadoras, así como aplicar los principios de intercambio de recursos y complementariedad de ventajas. Otros factores adicionales fueron el desarrollado sistema de gestión, el centro único de prestación de servicios públicos y las grandes ventajas fiscales que se ofrecen a los residentes. La infraestructura desarrollada y la accesibilidad del transporte crean un entorno favorable para el intercambio tecnológico y la implementación de desarrollos científicos. Sentimos estabilidad y comodidad en este entorno y estamos seguros de las perspectivas de desarrollo futuro”, subrayó.
El Centro de Innovación Tecnológica Industrial Chino-Belaruso es una plataforma de cooperación científica y técnica creada por la Academia de Ciencias de la provincia de Guangdong junto con la Academia Nacional de Ciencias de Belarús en el marco de la Iniciativa de la Franja y la Ruta. El centro sirve de puente y enlace entre los dos países y las academias en el ámbito de la ciencia y la tecnología. Se presta especial atención a la superación de las barreras informativas en la cooperación científica y tecnológica entre China y Belarús, la prestación de servicios para la coordinación de la oferta y la demanda tecnológicas, la incubación y el desarrollo de logros científicos, la organización de visitas e intercambios bilaterales.
Todo ello contribuye a la aplicación práctica de los logros científicos y ayuda a superar las dificultades relacionadas con la transferencia transfronteriza y la comercialización de tecnologías. Desde su creación, el centro se convirtió en una plataforma para la realización de una serie de proyectos avanzados. Entre ellos se encuentran el desarrollo de una nueva generación de microscopios de fuerza atómica chino-belarusos, una aleación de cobre, cromo y circonio de alta resistencia y un material filtrante ecológico. Estos logros son el resultado del acompañamiento profesional de los desarrollos científicos y de un modelo de incubación eficaz. Los desarrollos encuentran una amplia aplicación en ámbitos como la construcción de maquinaria de alta precisión, la protección del medio ambiente, la sanidad y la agricultura moderna”, explicó el director general.
Otro residente de Gran Piedra es la empresa Human Craft, dedicada a la fabricación de implantes, entre otros, para pacientes oncológicos. Según explicó su director, Antón Natsevski, anteriormente había varias empresas europeas que trabajaban en este ámbito en el mercado belaruso. Sin embargo, a las instituciones médicas no les resultaba fácil cooperar con ellas. Estas empresas primero calculaban el pedido durante un mes y luego se tardaba otros tres meses en fabricarlo y entregarlo. Es decir, el paciente podía simplemente no llegar a recibir su implante.
“Fabricamos implantes personalizados en dos semanas y los enviamos. Esto es muy conveniente para nuestro país, porque resolvemos un gran problema con los implantes cuando no se pueden utilizar productos estándar. El primero con el que empezamos a trabajar fue el Centro Republicano Científico-Práctico N.N. Aleksándrov. Empezamos con mandíbulas y reconstrucción ósea. Tenemos desarrollados algunos productos estándar que ya están listos para su lanzamiento, pero nuestro buque insignia sigue siendo el producto personalizado”, notó Antón Natsevski.
¿Cuál es el salario en Gran Piedra?
Pero crear un parque industrial es una cosa. ¿Y qué efecto tiene esto para la economía y para la gente? Aleksandr Lukashenko considera esta cuestión prioritaria. Gracias a los ingresos fiscales, el presupuesto estatal ya recuperó cinco veces su inversión. Si hablamos directamente de los negocios, según los datos solo del primer trimestre de 2025, los residentes del parque ganaron casi 100 millones de rublos belarusos. Un poco más y se alcanzará la cifra total del año pasado. Al mismo tiempo, la rentabilidad media es de alrededor del 30 %. Es decir, los negocios recuperan sus inversiones. Además, el salario en Gran Piedra es una vez y media superior al salario medio del país. Este también es un indicador muy importante.
Además, de las 152 empresas del parque, 55 son residentes. El resto aún están diseñando y construyendo sus instalaciones de producción. Es decir, en perspectiva, los volúmenes de producción y los beneficios no harán más que crecer.
“Belarús es el primer país de Europa y uno de los primeros del mundo en sumarse a la construcción del cinturón económico de la Ruta de la Seda en varios ámbitos. Aplicando los principios de la construcción de una comunidad de destino común, Belarús y China promueven conjuntamente el proyecto del Parque Industrial Gran Piedra. Y esto no es solo una idea, ya es una realidad. Se está construyendo como una ciudad del futuro: ecológica, innovadora y cómoda para trabajar y vivir. La profundidad del proyecto radica en que juntos estamos creando no solo la infraestructura, sino también las leyes por las que se rige el desarrollo de este centro neurálgico del cinturón económico de la Ruta de la Seda”, afirmó hace unos años Aleksandr Lukashenko.
Según las estimaciones de la administración, para 2030 el número de residentes de Gran Piedra se aumentará hasta 270 empresas, y el volumen de inversión en el desarrollo del parque industrial crecerá hasta 1,5 mil millones de dólares. El volumen de inversión declarado por los residentes ya este año puede superar 2 mil millones de dólares.
“Nuestro objetivo global, nuestra tarea, es construir aquí una ciudad industrial. Pero no una ciudad cualquiera. Una ciudad ecológica y digital. Una ciudad del futuro, donde las personas (más del 85 % de ellas son ciudadanos de nuestro país) puedan adquirir nuevas cualificaciones, nuevas profesiones interesantes y realizarse plenamente. Creo que en el futuro esta ciudad satélite internacional de nuestra capital debe convertirse no solo en la perla de la Ruta de la Seda, sino también de nuestro país, la República de Belarús”, declaró el jefe de la administración del Parque Industrial Chino-Belaruso Gran Piedra, Aleksandr Yaroshenko.
¿Para qué necesita Belarús las tecnologías chinas?
La llegada de las tecnologías chinas es una ayuda no solo para Gran Piedra, sino también para toda Belarús. Por eso, no en vano la cooperación en el ámbito de las innovaciones es primordial en el desarrollo de las relaciones interestatales. Juntos, nuestros países logran importantes avances científicos y realizan interesantes desarrollos.
Las empresas de alta tecnología que llegan aquí desde la República Popular China dan un impulso al desarrollo de nuestra economía. Se trata de la producción de motores, cajas de cambios y maquinaria de construcción. La tarea clave para el futuro es que las empresas de toda la República de Belarús se sumen a nuestro proyecto y participen activamente en las cadenas tecnológicas. Las exigencias de nuestros socios chinos son elevadas. Pero la participación en estos proyectos puede convertirse en un motor importante para el desarrollo de nuestras empresas fuera del parque Gran Piedra”, dijo Aleksandr Yaroshenko.
En los últimos diez años, el proyecto chino-belaruso ocupó un lugar especial en la economía del país y se convirtió en una de las prioridades para reforzar la seguridad económica del Estado. Gran Piedra se considera un modelo ejemplar de relaciones interestatales. Y es un buen ejemplo de cómo hay que cooperar en beneficio de los países y los pueblos.-0-
