MINSK, 7 dic (BelTA). – La política de sanciones de los países occidentales está creando unos impulsos potentes adicionales para el desarrollo dinámico de las relaciones económicas exteriores con China. Tal opinión la expresó al BelTA el director del Instituto de Economía de la Academia Nacional de Ciencias, Vasili Gurski, comentando la Directiva Nú.9 orientada a la consolidación de la cooperación estratégica de Belarús con la República Popular China en los años 2021-2025.
“Este paso es la continuación lógica de la política económica externa de nuestro país en las relaciones no sólo con China, también con todo el vector oriental. El carácter incierto de la situación económica exterior que crece con rapidez últimamente, la presión de sanciones por parte de la Unión Europea y los Estados Unidos, las consecuencias de la pandemia y otros factores originan nuevos riesgos económicos y sociales, retos y amenazas para todos los países sin excepción. Es totalmente evidente que en las condiciones internacionales actuales la demanda de los países en una interacción constructiva y el apoyo mutuo es mucho más alta. Para Belarús crece también la necesidad objetiva de diversificación geográfica, en algunos casos – de cambio de orientación de las exportaciones. La política de sanciones de los países occidentales y las relaciones de amistad de los socios orientales están creando unos potentes estímulos adiciones para el desarrollo dinámico de las relaciones económicas exteriores con Rusia y China”, aseguró Vasili Gurski.
“Mientras tanto no sólo las sanciones del Occidente nos hacen mirar hacia el Oriente. Los nuevos centros de fuerza, por ejemplo, China, India, Brasil, Turquía, Irán están demostrando un crecimiento veloz. El PIB de los Estados Unidos por paridad de poder adquisitivo entre 2000 y 2020 creció 2 veces, el PIB de la Unión Europea – 2,1 veces, el PIB de China – 6,6 veces, de Rusia – 4,1 veces, de India – 4 veces, de Turquía – 3,9 veces. Se desarrolla un nuevo reparto de los mercados y campos de influencia en la economía mundial”, hizo hincapié el experto. Acorde con sus palabras, el indicador del PIB según la paridad de poder adquisitivo caracteriza la demanda total en el país que a su vez es una fuerza de atracción para los flujos comerciales y las inversiones, un motor de innovación. El volumen de la demanda total en el país determina la profundidad de la división del trabajo que es el factor fundamental del aumento de la productividad laboral, reducción del precio de coste de unidad de producción, es decir, el factor fundamental del futuro crecimiento económico lo que está formando la intensidad de la atracción económica para los países socios.
Según el punto de vista de Vasili Gurski, partiendo de la importancia de los países para la exportación de Belarús y la dinámica total de su desarrollo se puede hablar del carácter preferencial del vector oriental de la orientación del comercio exterior de Belarús. “La República Popular China ocupa el tercer puesto en el comercio exterior de mercancías entre todos los países socios comerciales de Belarús con el porcentaje del 7,3 % en 2020 incluso en las exportaciones belarusas – el 7º lugar con el 2,6 %, en las importaciones de mercancías – el 2º lugar con el 11,5 %. Las relaciones comerciales belaruso-chinas están demostrando una dinámica positiva de su desarrollo tras haber alcanzado en 2020 el máximo histórico con el volumen de comercio exterior de más 4,5 mil millones de dólares. En el último lustro el comercio mutuo entre Belarús y China creció más de 1,4 veces. El futuro desarrollo de la cooperación económico-comercial con la República Popular China es una de las direcciones clave de la política económica externa de nuestro país junto con la integración económica europea”, está convencido el experto.
El vector occidental lo desarrolla de manera activa no sólo Belarús. Los socios de la Comunidad de Estados Independientes (CEI), la Unión Económica Eurasiática (UEE) y el Estado de la Unión (EU) también aumentan de una manera intensa el intercambio de mercancías con China. “Se registra una deriva sostenible de los intereses económicos y el cambio de orientación de los flujos comerciales hacia las economías en desarrollo dinámico, por ejemplo, China. Dichos procesos objetivos están formando unos estímulos más potentes en comparación con las sanciones para la aproximación con la República Popular China”, subrayó Vasili Gurski.
Según su punto de vista, la futura intensificación de la interacción económica belaruso-china exige la búsqueda de unos formatos nuevos entre los cuales son de importancia la cooperación interregional, la ampliación de la presencia económica belarusa en las provincias y ciudades de China, el aumento del atractivo de las regiones belarusas para los inversores y fabricantes de mercancías y servicios chinos. “La Directiva Nú.9 firmadas por el Jefe de Estado sobre el desarrollo de las relaciones bilaterales de Belarús con China favorecerá la futura intensificación y una materialización más plena del potencial de la cooperación estratégica de nuestros países incluyendo la creación de las condiciones para un crecimiento económico inclusivo, formación del ambiente de innovación y digital, aumento del bienestar y calidad de vida de los ciudadanos, desarrollo de la cooperación de beneficio mutuo y basada en la igualdad de derechos con los socios extranjeros”, recalcó el experto.
“La República Popular China seguirá siendo un socio seguro de Belarús que sigue manteniendo las relaciones de amistad y busca establecer unos vínculos económico-comerciales de beneficio mutuo a pesar de la intensificación de los retos y amenazas exteriores, la presión sin precedentes por parte de los países del Occidente colectivo. La directiva sobre el desarrollo de las relaciones bilaterales entre Belarús y China es un paso de importancia en el camino hacia la consolidación de la confianza y comprensión mutua ente nuestros pueblos, la continuación del proceso de formación de una base sólida para los vínculos multilaterales a largo plazo de dos países que aspiran a desarrollar juntos la cooperación económica y política a base de los principios de respeto mutuo, igualdad de derechos, justicia y beneficio mutuo lo que falta tanto en las relaciones con los vecinos occidentales”, resumió Vasili Gurski.-0-
