MINSK, 24 jun (BelTA). – El Banco de Desarrollo Euroasiático (BDE) elevó su previsión de crecimiento económico de Belarús en 2025 hasta el 3 % gracias a los buenos resultados obtenidos a principios de año y a la esperada ampliación del apoyo crediticio a la inversión, dijo el analista senior del Centro de Análisis de País de la Dirección de Análisis del BDE, Antón Dolgovechny, informa el corresponsal de BelTA.
El BDE había pronosticado anteriormente que en 2025 la economía belarusa crecería un 2,6 %. Ahora, el banco elevó la previsión al 3 %. En 2026-2027, el BDE espera un crecimiento del PIB de Belarús de un 1,7 %. “Tras un crecimiento sustancial del PIB en 2023-2024, Belarús también mantiene este año un ritmo elevado de desarrollo económico. Ya en enero-mayo vemos que es superior al ritmo medio de los últimos 15 años. El crecimiento económico se debe a la demanda interna. El volumen de ventas al por menor creció un 9,3 % y la inversión fija – más del 14 %. Al mismo tiempo, se observa una desaceleración del crecimiento en la industria, que fue el principal motor en los últimos años. El crecimiento del PIB de Belarús en 2025 se verá favorecido por un nuevo aumento del consumo, que se verá respaldado por el crecimiento de los salarios y el crédito al consumo. Además, seguirá ampliándose la actividad inversora. En este caso, el motor será la implementación de programas estatales y la simplificación del acceso al crédito para proyectos de inversión. El crecimiento económico también se verá respaldado por la dinámica recuperación del sector de las tecnologías de la información”, afirmó Antón Dolgovechny.
Cabe recordar que el PIB de Belarús aumentó un 3,9 % en 2023 y un 4 % en 2024. Para 2025 se prevé un crecimiento del 4,1 %.
Hoy, el Banco de Desarrollo Euroasiático presentó una nueva edición de sus previsiones macroeconómicas para los países miembros para 2025-2027. Se espera que los países de operaciones del BDE mantengan una elevada actividad económica durante el periodo previsto, a pesar de las difíciles condiciones económicas externas. Los países seguirán apoyándose activamente en fuentes internas de crecimiento, sobre todo en la inversión de infraestructura e industrial, así como en la demanda de consumo en rápido crecimiento, en un contexto de aumento significativo de los ingresos de la población.
Los analistas del BDE también compartieron su visión de las tendencias clave de la economía mundial y su impacto en la región euroasiática. En su opinión, el crecimiento de la economía mundial se ralentizará hasta el 3 % en 2025, frente al 3,3 % en 2023-2024. El aumento de la incertidumbre en el contexto de la política arancelaria de Estados Unidos y los factores estructurales negativos tendrán un efecto moderador sobre la actividad económica mundial. La disminución de la confianza de los consumidores y las expectativas empresariales ralentizarán la actividad comercial en la economía estadounidense, donde el PIB crecerá un 1,4 % en 2025, tras un aumento del 2,8 % en 2024. En la zona euro, el crecimiento económico seguirá siendo débil este año, alrededor del 0,6 %, tras el 0,9 % del año anterior. El crecimiento de la economía china se mantendrá cerca del objetivo del 5 % en 2025 gracias a la continuación de la política de estímulo de la demanda interna.-0-
