MINSK, 6 may (BelTA). – Los representantes permanentes de Armenia, Belarús, Kazajistán, Kirguistán, Rusia, Tayikistán, Turkmenistán y Uzbekistán ante la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) aprobaron la declaración con motivo del 72º aniversario de la Victoria en la Gran Guerra Patria. Lo comunicaron a BelTA en el servicio de prensa del Ministerio de Asuntos Exteriores de Belarús.
“El Día de la Victoria es un símbolo de valentía y heroísmo, hazaña sin par y pruebas duras que sufrieron decenas de millones de personas dando sus vidas por defender la libertad y liberar a la humanidad del nazismo. Apreciamos la aportación de los Aliados a la Victoria Común en la Segunda Guerra Mundial y de otros estados que lucharon contra el nazismo. El papel esencial en este caso lo jugaron los pueblos de la Unión Soviética que derrotaron las principales fuerzas de la Wehrmacht. Rendimos homenaje a la gente de todas las nacionalidades y países que murieron en la lucha contra dicho mal en la frente, en los destacamentos de guerrilleros, víctimas de bombardeos, campos de concentración, ocupación del régimen nazi y privación. Admiramos a los que trabajaron con abnegación en la retaguardia en nombre de la Victoria común”, cita la felicitación.
Los diplomáticos recordaron una fecha conmemorativa más: el 11 de abril, Día Internacional de la Liberación de los Campos de Concentración Nazis, proclamado en memoria de la rebelión de los prisioneros del campo de concentración de Buchenwald en abril de 1945.
“Son inadmisibles los intentos de falsificar la historia de la guerra y borrar de nuestra memoria las lecciones trágicas de la historia. Nuestra obligación es cuidar de los veteranos de la guerra y los prisioneros de los campos de concentración que cada año son menos; preservar el recuerdo sagrado sobre todas las víctimas del nazismo, sus tumbas y monumentos en su honor, evitar su profanación. Debemos reunir nuestras fuerzas para hacer frente a cualquier intento de encubrir los crímenes de los nazis y sus colaboradores condenados por los Juicios de Núremberg, llevar ante la justicia a los que hasta ahora evitaron el castigo justo. Tales delitos no tienen fecha de caducidad”, enfatizaron las partes.
Recordando que la aspiración a la aplicación práctica de las teorías de superioridad racial se convirtió en una de las principales fuerzas impulsoras de la Segunda Guerra Mundial, los representantes permanentes constataron con una gran preocupación el renacimientos de la ideología nazi, el aumento alarmante de manifestaciones del nacionalismo agresivo, el racismo, la discriminación, la intolerancia y la xenofobia. Las partes llamaron a una lucha sin compromiso contra estos fenómenos.
“A este respecto aplaudimos la aprobación el 19 de diciembre de 2016 en el marco de la 71ª sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas de la resolución para combatir la glorificación del nazismo, neonazismo y otras prácticas que contribuyen a exacerbar las formas contemporáneas de racismo, discriminación racial, xenofobia y formas conexas de intolerancia. Consideramos que es especialmente actual en las condiciones globales actuales. Teniendo en cuenta los retos en el ámbito de la seguridad y las amenazas transfronterizas que son cada vez más numerosas hoy en día hace falta volver a reunir los esfuerzos de los estados de la OSCE para resolver de manera pacífica los conflictos existentes y evitar unos nuevos. Estamos convencidos de que es la única manera de proteger el presente y el futuro de nuevas guerras”, cita la declaración.
Los diplomáticos subrayaron que el aniversario actual de la Victoria sobre el nazismo vuelve a recordar que es necesario consolidar los esfuerzos de la comunidad mundial incluyendo los estados miembros de la OSCE a base del principio de la indivisibilidad de la seguridad incluso con el fin de elaborar una fuerte inmunidad al virus del nazismo y sus manifestaciones, no permitir que se repita la Segunda Guerra Mundial, catástrofe del siglo XX.-0-
