MINSK, 22 feb (BelTA). – Para prevenir conflictos se necesita una sincera conversación global sobre una nueva distensión. Lo declaró el representante permanente de Belarús ante las Naciones Unidas, Andréi Dapkiunas, el 21 de febrero interviniendo en los debates abiertos en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre los conflictos en Europa. El vídeo de la intervención del diplomático belaruso está disponible en la cuenta de Twitter de la Representación Permanente de Belarús ante las Naciones Unidas, anuncia BelTA.
“En el mundo, incluso en el marco de las Naciones Unidas, hoy en día se necesita mucho una amplia discusión sobre los principios de la futura coexistencia de los estados y los pueblos. Tal discusión debe incluir obligatoriamente el temario de los conflictos europeos, las medidas de confianza en las esferas militar y de seguridad. Hace 40 años para aliviar la tensión y disminuir el grado de hostilidad se necesitó el proceso de Helsinki, ahora de nuevo se siente la necesidad de las decisiones parecidas para superar el aislamiento global. Ahora se necesita una sincera conversación global sobre una nueva distensión”.
Según las palabras del diplomático, maduró la necesidad de un diálogo sincero orientado a un resultado concreto, en primer lugar, en el marco de las Naciones Unidas y la OSCE, sobre las causas de la crisis internacional de la responsabilidad y las vías de su superación. “No necesitamos las discusiones no presenciales, las campanadas de propaganda en los medios mediáticos, el intercambio de resoluciones, las cumbres de gala una vez a cinco años. Necesitamos las entrevistas personales regulares de los líderes mundiales más valientes y responsables para entender las nuevas reglas de la multipolaridad, buscar las vías del respeto mutuo de los intereses, reconocer la diversidad de la evolución de la civilización humana”, señaló Andréi Dapkiunas.
Él subrayó que Belarús tiene la historia de la participación imparcial en tales procesos. “Estamos dispuestos a seguir desempeñando este papel activa y honestamente”, aseguró el diplomático belaruso.
Hablando de los conflictos en Europa, Andréi Dapkiunas marcó que este tema representa una realidad funesta. “Las lecciones terribles de las dos guerras mundiales desatadas precisamente en el continente europeo las aprendimos mal. Esperamos sinceramente que en las Naciones Unidas no haya países que quieran la guerra, que todos nosotros estemos interesados en afianzar el diálogo internacional y el mejor entendimiento entre los pueblos. Entonces por qué no logramos convertir las discusiones en el Consejo sobre la búsqueda de los caminos hacia la paz en algo más que simplemente la presión pública y las acusaciones mutuas escandalosas. Según nuestro parecer, la causa de esto es la pérdida dentro de setenta años después de la última guerra mundial de la agudeza de la percepción de una nueva catástrofe militar global. Esta vez ya será realmente la última en la historia de la humanidad”.
“Creemos de modo bastante imprudente en la seguridad de los mecanismos de la prevención de un apocalipsis artificial, el raciocinio absoluto y el instinto de conservación. Por desgracia, la historia nos enseña que estos mecanismos no funcionan en condiciones del aislamiento mutuo y la ausencia de la confianza por lo menos mínima, el rechazo de los compromisos y la inclinación a demonizar a los oponentes. Estos mecanismos no pueden prevenir el conflicto global hasta que la base de nuestra visión del mundo sean la fe en el monopolio de la verdad y la impecabilidad”.
Según las palabras del representante belaruso, estos mecanismos son inútiles hasta que las potencias mundiales y sus líderes encuentren la valentía moral y cívica para comenzar una conversación directa sobre su responsabilidad colectiva por la prevención de una nueva oposición global – fría o ardiente.
Con todo eso Andréi Dapkiunas expresó las condolencias con motivo del fallecimiento del representante permanente de Rusia ante las Naciones Unidas, Vitali Churkin.-0-
